Castilla-La Mancha tienen en estos momentos 3.764 casos activos de violencia de género de mujeres que precisan algún tipo de protección y seguimiento policial, mientras que este año se han dictado en la región 133 órdenes judiciales de alejamiento con colocación del dispositivo 'cometa' (pulsera) para evitar agresiones.
Así lo han dado a conocer este jueves el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, y la jefa de la Unidad de Coordinación contra la Violencia contra la Mujer de la Delegación, Consuelo García, que han indicado también que hay 91 casos activos de menores que precisan de algún tipo de protección.
Desde que hay registros de datos, que se iniciaron en 2003, hasta la actualidad, en Castilla-La Mancha un total de 30.926 mujeres han denunciado haber sido víctimas de violencia, tanto física como psicológica.
En este sentido, García ha señalado que el número de denuncias se ha mantenido en cifras similares en los dos últimos años.
En 2019 se pusieron en la región 6.051 denuncias por violencia de género, que se redujeron a 5.541 en 2020, en tanto que este año hasta julio se habían puesto 1.316 denuncias hasta julio.
Una treintena de actividades repartidas por las cinco provincias de Castilla-La Mancha conforman el grueso de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las mujeres. El acto central tendrá lugar el día 25 de noviembre, con la entrega de los ya consolidados ‘Premios Menina’, cuyo fallo se dará a conocer en unas semanas.
Habrá jornadas, como la de Periodismo y Violencia en la Facultad de Comunicación de Cuenca o la prevista sobre las mujeres y niñas como víctimas de la trata de seres humanos, ponencias, talleres, conferencias, ha detallado el delegado, que ha avanzado también que se va a trabajar especialmente con la comunidad educativa.
Tierraseca ha defendido que “el objetivo que tenemos es seguir concienciando a la sociedad para que desaparezca ese sector de la población que aún sigue negando la violencia de género”.
"La gente joven debe de recibir una especial atención en la sensibilización y formación, porque estamos observando un retroceso y un aumento de la negación de la existencia de este tipo de violencia; hay que atajarlo con formación y con sensibilización”, ha apuntado, por su parte, Consuelo García.