Cuando parecía que septiembre sería el mes con el precio de la luz más caro de la historia, llega octubre y demuestra que se pueden seguir batiendo récords. Este viernes se disparan todas las alarmas ya que el precio medio de la luz en el mercado mayorista subirá un 13% hasta los 216,01 euros por megavatio-hora (MWh). Por primera vez, el promedio del precio mayorista se sitúa por encima de los 200 euros el MWh. El tramo horario más caro será, un día más, entre las 20:00 y las 21:00 horas, cuando el coste por MWh será de 230 euros. El más barato, a las 16:00h, cuando se situará en 198,77 euros.
Aunque los precios son disparatados, la situación no es nueva. La luz lleva cerca de tres meses de subidas continuadas de precios históricos que han culminado con una media de más de 167 euros en septiembre. Estos datos llegan, además, en plena escalada del precio de todas las materias primas energéticas en todo el mundo, como el gas, el petróleo y el carbón, y de unos niveles de precios inusualmente altos de los derechos de emisión de CO₂ en Europa. En comparativa anual, el incremento ronda el 300%.
El precio diario de la luz permanecerá en cotas elevadas y al alza hasta, al menos, marzo del año que viene, cuando con la llegada de la primavera el gas natural debería iniciar un camino descendente y la presión sobre el recibo debería ir a la baja.
El enésimo capítulo en la escalada del precio de la electricidad iniciada en verano afecta al mercado mayorista, en el que se negocian los precios las empresas suministradoras y las comercializadoras. Sin embargo, también impacta directamente a quienes tienen tarifa regulada (también conocida como PVPC, tradicionalmente la más conveniente para la mayoría de usuarios), que tienen unos 10,7 millones de hogares, cuyo recibo fluctúa al son de ese indicador.
El precio de la electricidad mayorista, además, solo representa una parte del recibo de la luz, alrededor del 50%, el resto son peajes (costes extrapeninsulares, primas a las renovables, etc) e impuestos (IVA e impuesto especial).
En septiembre el precio de la electricidad subió un 47%, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que advierte de la imparable subida del precio de la electricidad ha anulado el efecto de las medidas aprobadas por el Gobierno y que entraron en vigor el pasado 16 de septiembre (reducción del Impuesto de electricidad y revisión drástica a la baja de los cargos del sistema) que completaban la reducción del IVA al 21% ya aplicada desde el mes de junio. Una vez aplicadas estas medidas la factura de un hogar medio se eleva hasta los 87,4 euros (4.6 kW de potencia y 292 kWh de consumo mensual).
El precio de la electricidad en el mercado mayorista durante el mes de septiembre ha escalado a una media de 156,15 euros MWh desde los 105,94 euros MWh de agosto. La subida es todavía mayor, si se compara con los 41,96 euros de septiembre de 2020. Esta factura supone un incremento de nueve euros sobre la ya elevada factura de agosto (78,3 euros). De no haberse aprobado ninguna de estas medidas, el importe de la factura media se hubiera elevado por encima de los 107,2 euros. Si las medidas se hubiesen aplicado desde el día 1 de septiembre la factura se hubiera reducido hasta los 78,2 euros. Prácticamente la misma que el pasado mes de agosto.
La factura acumulada durante 2021 hasta este mes de septiembre es de 635 euros cuando en el mes de septiembre de 2020 era solo de 497 euros, lo que supone 138 euros (un 27,8% más). Si se compara con la factura acumulada de 2018, (598 euros) la supera en 37 euros. Para la OCU el compromiso del Gobierno, de no superar el importe de 2018 más la inflación, se antoja imposible de cumplir, ya que, para ello, la factura de estos últimos tres meses debería ser inferior a 50 euros, algo poco o nada probable.
Además de las subidas que afectan directamente a la tarifa regulada PVPC, la organización advierte de las importantes subidas que se están produciendo en el mercado libre por todas las comercializadoras. “Además, estas han aprovechado el caldo de cultivo de la incertidumbre que genera la subida de electricidad entre los consumidores para lanzar ofertas con precio fijo a largo plazo que en un futuro puede resultar muy perjudiciales para los consumidores si no cuentan con la información suficiente”. Ante eso avisa a los consumidores para que extremen la prudencia a la hora de contratar nuevas tarifas y estén muy atentos a las comunicaciones sobre cambios de tarifas que les hagan llegar las comercializadoras o al momento de renovación de los contratos, ya que es cuando se aprovechan para en ocasiones de forma poco transparente subir las tarifas.