La erupción del volcán Cumbre Vieja en La Palma no se detiene. El volcán ha entrado en una nueva fase en la que se ha registrado un aumento de "la intensidad de la actividad explosiva", según ha informado el Instituto Volcanológico de Canarias.
El avance de la lava hacia el mar se ralentiza en La Palma, con un frente que alcanza alturas en algunos puntos de 12 metros e incluso más y que se sitúa a 2,5 kilómetros en línea recta hacia la costa, según muestran las imágenes por satélite del programa Copernicus, de la Agencia Espacial Europea.
Hasta ahora, la superficie cubierta por la colada ha crecido un 50% en las últimas 12 horas. En total, 154 hectáreas han quedado arrasadas y 320 edificios han sido engullidos, según las estimaciones de Copernicus.
El muro de lava ya se ha adentrado en algunos puntos de Todoque, donde los vecinos, que pudieron entrar ayer durante una hora a sus casas, han vuelto a hacerlo desde esta mañana para retirar objetos personales y documentación y podrán acudir hasta las 21:00 horas, según el Cabildo de La Palma.
Los bomberos están tratando de canalizar una colada de lava hacia un barranco para salvar, en lo que se pueda, Todoque. La nube de dióxido de azufre llegará a la Península a partir de esta tarde, e irá cubriendo todo el territorio nacional progresivamente el jueves y viernes, según Copernicus.
El líder del PP, Pablo Casado, ha pedido la declaración urgente de zona catastrófica: “Lo que estamos viendo no es un espectáculo maravilloso, es una catástrofe”. La erupción del volcán mantiene a 6.000 personas desalojadas de sus casas.