El incendio forestal que se declaró el viernes en El Tiemblo (Ávila) y después se extendió al vecino término de Cebreros continúa activo tras arrasar unas 900 hectáreas, aunque la Junta de Castilla y León ha rebajado a nivel 1.
Además, el Ejecutivo regional ya ha solicitado la retirada de los efectivos de la Unidad Militar de Emergencia que desde la última hora de viernes se encontraban desplegados en la zona.
Tras la intervención de medios humanos -500 personas- y materiales de distintas administraciones, del Gobierno de Castilla y León han destacado que la evolución es "buena", aunque los trabajos continúan.
Las llamas, que no han obligado a evacuar ninguna población, aunque han tenido en vilo toda la noche a los vecinos de esta zona.
En total, la UME ha desplegado en la zona 123 militares, 47 vehículos y una máquina pesada, para tratar de controlar este fuego.
El último informe de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de este sábado sigue manteniendo el incendio en un Nivel 2 de peligrosidad decretado el mismo viernes, poco tiempo después de que comenzara el incendio, en una escala de 0 a 3.
La decisión de declarar el Nivel 2 estuvo motivada por la "cercanía de las lamas a las viviendas del municipio", lo que podría entrañar "riesgo para la población y los bienes", y ante el corte de la carretera N-403 (Ávila-Toledo), así como varias vías locales de la zona. A primera hora de la tarde del sábado se ha reabierto uno de los dos carriles de la N-403 en dirección a Ávila
La buena evolución del incendio, debido a la participación de un amplio despliegue de medios humanos y materiales, se ha producido después de una noche "durísima, con continuos sobresaltos", ha explicado el delegado territorial de la Junta, José Francisco Hernández, durante la visita a la zona afectada.
Los trabajos se han visto favorecidos por el descenso considerable de las temperaturas este sábado y la proximidad del embalse de El Burguillo, que ha facilitado el acopio de agua para los medios aéreos.