El Real Monasterio de Santa María de Guadalupe ha acogido, durante esta mañana, la presentación de la credencial del peregrino a Guadalupe. Se trata del documento que certifica el recorrido, a través de los diferentes itinerarios, para llegar ante la imagen de la “Morenita de las Villuercas”. La credencial ha sido preparada, conjuntamente, por la Archidiócesis de Toledo y el Monasterio de la Puebla de Guadalupe.
En la presentación han intervenido el arzobispo de Toledo, Mons. Francisco Cerro Chaves; el Guardián del Monasterio, Fray Guillermo Cerrato, OFM; la delegada diocesana de Fe y Cultura, doña Pilar Gordillo, y el delegado para el Cuidado de la Creación don Javier Gómez- Elvira.
Esta credencial se puede adquirir en el Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, en las sedes de los obispados de Toledo, de Mérida-Badajoz, de Coria-Cáceres, de Plasencia, y también en la Basílica de Ntra. Sra. del Prado de Talavera de la Reina.
También se puede descargar telemáticamente, en formato PDF, en la web del jubileo: www.guadalupejubileo.com
El delegado para el Cuidado de la Creación de la archidiócesis de Toledo, don Javier Gómez- Elvira, ha explicado los 23 itinerarios diferentes y las diferentes rutas y caminos que el peregrino puede encontrar en la credencial del peregrino, donde a través de un código QR, el peregrino puede acceder a la información sobre las diversas rutas
Además de los caminos más históricos, como el Camino Real de Madrid, “así llamado por el patrocinio que recibe de los reyes”, ha dado a conocer la existencia de diferentes itinerarios existentes en la península ibérica y que se han ido elaborando a través de diferentes épocas históricas.
Para el delegado del Cuidado de la Creación “resulta emocionante comprobar cómo la fe ha mantenido y mantiene vivos los caminos” refiriéndose a otras variantes que atraviesan la comunidad autónoma de Extremadura como son el “Camino de los Descubridores, que pasa por localidades que rememoran a ilustres personajes extremeños como Francisco de Godoy, Mencía de los Nidos, Francisco Pizarro y Francisco de Orellana”.
Toda la información sobre las diferentes rutas y caminos se puede encontrar en el siguiente enlace: http://www.guadalupejubileo.com/caminos-a-guadalupe/
Durante su intervención, la delegada de Fe y Cultura, de la Archidiócesis Primada, doña Pilar Gordillo, ha indicado que en Guadalupe “ha brotado la vida del hombre, la vida espiritual, fruto del agua del espíritu de un río: Guadalupe.”
Gordillo ha enfatizado que los diferentes caminos se encuentran “salpicados de ermitas, iglesias, templos parroquiales, que anticipan el encuentro con la Madre, Virgen Morena de las Villuercas, donde las imágenes, los retablos, las pinturas recogen en sus expresiones los misterios de la vida de Cristo, el amor a la Virgen y los santos, y la vivencia de la fe de muchos pueblos”.
Doña Pilar Gordillo ha insistido que “Guadalupe nos espera con la sanación también por la liturgia y la Palabra porque se trata del epicentro de la vida espiritual de toda una comarca, de todo un pueblo de castellanos y extremeños”.
El arzobispo de Toledo, Mons. Francisco Cerro Chaves, durante su intervención ha subrayado que la presentación de la credencial es “un momento histórico porque no existía credencial oficial del peregrino”. El documento, en palabras de D. Francisco, “recoge la información de todos los caminos existentes”.
Mons. Cerro ha explicado, igualmente que “se trata de integrar y sumar, a lo que ya existe, para peregrinar a la Casa de la Madre, que sana a los hijos heridos”. El Primado ha indicado que “la credencial podrá ser sellada en las diferentes parroquias y otras instituciones” por donde atraviesan las 23 rutas de peregrinación.
También ha querido hacer referencia a la invitación que él mismo realizaba al Papa Francisco, en el Vaticano el pasado 10 de mayo, para visitar Guadalupe. “El Papa miró con atención la imagen de la Virgen de Guadalupe que le regalamos”. Ha querido aprovechar Don Francisco Cerro la carta que el Papa enviaba a los prelados de Toledo y de la provincia eclesiástica de Mérida-Badajoz, donde Francisco expone “un itinerario espiritual, una peregrinación interior”.