Isabel Diaz Ayuso ya tiene una nueva Telemadrid. El Pleno de la Asamblea de Madrid ha aprobado este jueves la reforma de la Ley de Radio Televisión Madrid (RTVM) presentada por el PP, gracias a su voto y la abstención de Vox.
La modificación de la normativa, que ha contado con la oposición de Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos, cambia el modelo de elección de su Dirección y consejo de administración y permite el relevo de su actual cúpula. Así, establece que el mandato del director general será de cuatro años, no renovables, contados desde su nombramiento.
El efecto más inmediato va a ser que Ayuso destituirá al director general de la cadena, José Pablo López, para poner en su lugar a un administrador provisional designado directamente por su Gobierno.
Los grupos de la izquierda han acusado al Gobierno de Ayuso de querer hacerse con "el control" de Telemadrid con la reforma, mientras que el PP asegura que la intención es garantizar su "pluralidad e independencia".
La diputada de Unidas Podemos, Vanessa Lillo, indicó que lo que se aprueba es la "condena a muerte" de Radio Televisión Madrid, producto de una "especie de castigo o de que van a iniciar de nuevo una cacería".
Por su parte, la diputada del PSOE, Isabel Aymerich, criticó que esta reforma responde a "intereses muy concretos, gubernamentales y electorales", que no nace de "modernizar, ni adaptar o armonizar" RTVM, sino para hacer "caducar" al director general y colocar a un administrador provisional nombrado por el Consejo de Gobierno.
El diputado de Más Madrid, Hugo Martínez, seguró que la reforma es la "primera cacicada" que ejerce el PP tras "quitarse de encima" a Ciudadanos.
Por su parte, el diputado de Vox, José Luis Ruiz Bartolomé, sostuvo que la diferencia de su formación con el resto de partidos es que mientras los demás aspiran a poner a su servicio "los chiringuitos que cuelgan de la Administración" es que ellos aspiran "simple y llanamente a cerrarlos", tal y como quieren hacer con Telemadrid.
Así, Rocío Monasterio justificó su apoyo argumentado que no podía votar con la izquierda. En este sentido, llama la atención que desde Vox se defienda el cierre de Telemadrid mientras se abstiene en una medida sobre el ente público y que conlleva la continuidad del mismo.