La consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, y el viceconsejero de Educación, Amador Pastor, han informado este lunes de que la idea del Gobierno de Castilla-La Mancha para el próximo curso escolar es apostar por una mayor presencialidad del alumnado de 3º y 4º de ESO y de 1º y 2º de Bachillerato.
A preguntas de los medios, en rueda de prensa, han explicado que este curso ha habido en determinados centros un régimen de semipresencialidad en 3º y 4º de la ESO y 1º y 2º de Bachillerato. La idea es que la semipresencialidad se aplique como carácter de excepcionalidad y no como una medida normalizada como sí ha ocurrido en el presente curso.
La consejera ha asegurado que las medidas higiénico-sanitarias tienen que permanecer en los centros, pero ha admitido que el arranque del próximo curso se abordará "con una mayor flexibilidad" en el tema de los protocolos, sobre todo en la distancia del alumnado.
Esta situación ocasionará otra reorganización de los centros educativos de la que serán informados sindicatos y docentes. Ya está listo el borrador del documento de instrucciones de desarrollo de inicio de curso 2021-2022 y de la guía educativo-sanitaria que marcará los parámetros de las medidas para el próximo curso.
En cuanto a la contratación de profesores prevista para el próximo curso, la consejera ha apuntado que está viene condicionada por el número de desdobles, algo que aún se desconoce. "No podemos hablar de cifras concretas porque hay que ver las necesidades de los centros".
No obstante, el viceconsejero de Educación ha comentado que si se apuesta por una mayor presencialidad del alumnado de 3º y 4º de la ESO y 1º y 2º de Bachillerato "posiblemente" se necesite más profesorado en esos niveles y, por contra, si se rebajan determinadas distancias en niveles inferiores ahí es donde se pueda necesitar menos profesorado. En todo caso, "nosotros siempre hemos sido partidarios del estudio centro a centro", ha concretado.