De acuerdo con las previsiones de Meteored, se espera que el trimestre de junio, julio y agosto sea más cálido de lo normal en el conjunto del territorio, aunque con importantes diferencias entre regiones.
A nivel gráfico, parece que la dorsal anticiclónica estará centrada sobre la vertical peninsular, por lo que podrán producirse varias irrupciones de aire tropical continental (cálido y seco), sin olvidar que en verano la Península Ibérica "fabrica" su propio calor, al ser prácticamente un minicontinente. No se aprecian anomalías significativas en la presión en superficie, aunque probablemente predominarán los vientos del sur y de levante.
Según apuntan los mapas, en buena parte de Castilla-La Mancha, sur de Castilla y León, la Comunidad de Madrid y en el suroeste de Aragón las temperaturas pueden estar de 1 a 2 ºC por encima de la media, por lo que podría ser un verano de récord en estas regiones, algo que se viene repitiendo en los últimos años.
En verano la subsidencia (asociada a las altas presiones) refuerza la estabilidad en la troposfera inferior, por lo que las precipitaciones son escasas, pero con matices, ya que las tormentas pueden cambiar el balance pluviométrico de la estación en pocas horas. Las previsiones apuntan a que probablemente será más seco de lo habitual en el noreste, apreciándose la misma tendencia, aunque en menor medida, en el sureste y sur.