La Dirección de S.A. De Muebles de Talavera adelantó, a través de un comunicado remitido a los medios, que cerrará sus establecimientos comerciales de la calle Muñoz Urra, 22, y de la Avenida Francisco Aguirre 404, que tienen como nombre comercial Muebles de Talavera y Tifón Hipermueble, respectivamente.
En el escrito, recuerdan que los últimos cinco años han realizado importantes esfuerzos económicos y humanos para reducir los costes operativos y mejorar la productividad de la empresa, aunque finalmente “el incesante descenso de las ventas hace inviable económicamente un negocio de muebles que durante tantos años ha sido un revulsivo para la economía de la ciudad”.
La firma abrió sus puertas en junio de 1968, hace 44 años, como la tienda de muebles más grande de España, con 13 plantas y más de 6.000 metros cuadrados con exposiciones de muebles y complementos de decoración. Por sus instalaciones han pasado personalidades del mundo de la política, del fútbol, de la televisión, del teatro o de la radio, llevando así el nombre de Talavera a muchas ciudades de España y del extranjero. En el comunicado recuerdan a Madrid especialmente, ya que, gracias a grandes inversiones publicitarias, tuvo gran repercusión el eslogan 'los Muebles de Talavera, todo Madrid los pondera'. Muchos reconocimientos también los recibidos en su trayectoria empresarial, como el Premio Internacional Estrella de Oro a la Calidad, varios premios 'Master a la Popularidad', Premio Cámara de Comercio de Toledo, los premios de Onda Cero, de La Voz del Tajo y de la Cadena Cope, y especialmente, el Premio 'Ciudad de Talavera' en la categoría de Economía. La nota concluye agradeciendo a clientes y trabajadores que han formado parte de esta familia empresarial, así como a la ciudad en general por su acogida, lamentando que “la crisis económica se ha encargado de finiquitar” este negocio familiar.
Muebles de Talavera llegó a alcanzar el medio centenar de empleados, aunque ahora se enfrente a un proceso de liquidación de existencias que no se prolongará más allá del último trimestre del año. La firma familiar, de los Bermejo Arnanz, aseguró también que han intentado “hasta el extremo” seguir con su etapa empresarial, aunque finalmente el emblemático edificio de doce plantas de Muñoz Urra dejará de prestar sus servicios comerciales.