El CDE Velada Fútbol Sala fue, con todo el merecimiento del mundo, el justo vencedor del primer derbi comarcal del Grupo IV de la Segunda División 'B' en un encuentro donde los hombres de Chema Corrochano y Álvaro Martín barrieron del mapa a un Talavera Fútbol Sala que sólo dio señales de vida cuando el partido ya estaba visto para sentencia logrando Justo Cáceres (el mejor de los los cerámicos) tres tantos de manera consecutiva que dejaron el marcador en un definitivo 6-3 que hasta parece excesivo premio para los cerámicos.
Y es que los morados saltaron a la pista con dos argumentos que todo equipo tiene que tener para ganar un encuentro y que fue lo que les faltó a los de Talavera de la Reina: motivación e intensidad. Como si no fuese la cosa con ellos vieron cómo su oponente les pasaba por encima como una apisonadora y este calvario arrancó en el segundo minuto de partido cuando dejaron rematar por dos veces a Churrero y este a la segunda que tuvo no perdonó batiendo por bajo y de volea a Víctor López. La previsible salida en tromba de los velaínos, que durante toda la semana se estaba avisando de que iba a llegar, se le atragantaba a los de Álvaro Fernández y Carlos Martín. Pero esto era un simple aperitivo con lo que estaba por ocurrir, ya que en el minuto 4 Fonsi ejecutaba una falta y servía a Churrero para que nuevamente este lograse su segundo tanto en su cuenta particular y el segundo de su equipo. Velada estaba jugando al límite ante unos visitantes que practicaban un fútbol sala que estaba muy alejado del que pueden ser capaces de realizar. Entre pérdida y pérdida (hasta quince llegaron a sumar los talaveranos en este tiempo) Velada tenía tiempo para seguir disfrutando y sobre todo para hacer disfrutar a una afición que abarrotó la grada de 'La Vega' y que se volvería a un más loca cuando otra genialidad de Churrero, que puso la pelota en la misma escuadra, hacía que el 3-0 subiese al marcador y poco después Chispi se sumaba a la fiesta con un punterón que besaba las redes. Tan sólo habían pasado diez minutos y los morados dominaban por 4-0, un marcador para frotarse los ojos. De aquí al descanso a Talavera parece que se quitó un poco la empana mental que tenía encima, pero eso no era suficiente para batir la meta defendida por Jesús. Tan sólo Víctor López lo conseguiría con un tiro desde su área, pero la bola pegó antes en el techo y la acción quedó invalidada. Lo mejor que les podía pasar a los visitantes era que llegase el tiempo de descanso y poder recapacitar de todo lo malo hecho para tratar de solucionarlo a lo largo de la segunda mitad, porque a pesar de ser cuantro tantos de renta en contra, en este deporte cualquier cosa podía ocurrir. Tras el paso por los vestuarios parece que los errores graves se consiguieron aminorar, pero estos no llegaron nunca a desaparecer. Velada multiplicaba en intensidad a su oponente, llegaba antes a los balones, luchaba por ganar cualquiera de los rebotes y eso por desgracia Talavera no lo tendría en toda la tarde. Fruto de esta superioridad mental Panucci llegaba al segundo palo para rematar un servicio en el 22' y en el 32' Churrero conseguía su cuarto tanto de la tarde con un remate de tacón ante un Víctor López que, aun recibiendo seis tantos, evitó más de una decena de ocasiones cantadas.
No le quedaba otra a los blanquiazules que buscar el juego de cinco y con este al fin llegaron los tantos que ante tanto Jesús como la zaga habían impedido con brillantes intervenciones. Sería en el 33' cuando una jugada trenzada era remachada en boca de gol por Justo Cáceres, el cual hacía el 6-1. Para ver el 6-2 hubo que esperar hasta el 36' y nuevamente sería el veterano jugador talaverano el que conseguiría el gol después de convertir un diez metros.
El último de los tantos de maquillaje llegaría tan sólo un minuto después, nuevamente gracias a Justo Cáceres tras un punterón que batió por bajo a Jesús. Quedando tres minutos como quedaban, algún que otro optimista pudo soñar con buscar la heróica, pero los sueños, sueños son, y este optimismo murió cuando Nando derribó por detrás a un rival, vio su segunda amarilla y dejó en inferioridad a su equipo. La cita moría en La Vega con el marcador de 6-3 para los chicos de Chema Corrochano y Álvaro Martín. Sin duda toda una fiesta para el conjunto local y el tercer 'abre ojos' para los talaveranos en una Segunda División 'B' en la que no se gana por el nombre, se gana por los hombres.