El digital de EL ESPAÑOL publica este miércoles, con la firma de Enrique Recio y David Palomo, un amplio reportaje al que titula: La lista de los 285 “listos” que se han saltado la cola para ponerse la vacuna contra el Covid. Ya en el subtítulo se dice que “sobraban vacunas”, sostienen unos y otros como excusa. La mayor parte de ellos se ha negado a dimitir.
Como entradilla, y antes de entrar en detalles comunidad por comunidad, los autores exponen que "Sobraban vacunas", sostienen, unos y otros, excusándose. Altos cargos del Gobierno, alcaldes, concejales o directores de centros. De Murcia, Madrid, Córdoba o Zaragoza. De izquierdas o de derechas –aunque, en su mayoría, de PSOE y PP–. Mejores o peores gestores. Da igual. Comparten, todos, sin excepción, la misma patología: apropiarse del bien ajeno. En este caso, saltándose su turno para recibir la primera dosis de la vacuna de Pfizer, aprovechando sus privilegios para obtener el bien más preciado. La semana pasada, en total, eran 16 representantes. Este martes , la lista se ha multiplicado hasta llegar a los 285.
EN CASTILLA LA MANCHA
Curiosamente nuestra región está libre de “listos”, al menos no ha saltado a la opinión pública ninguno de ellos, pese que desde algunos sectores hayan apuntado presuntos privilegios para el alcalde de La Roda, Juan Ramón Amores, que en la anterior legislatura fue director general de Deportes con Emiliano García-Page. Recientemente, y a colación de las informaciones que denunciaban las situaciones que encabezan esta información, Amores colgaba un vídeo en que venía a decir “Estoy hasta las narices de que se hable de políticos que utilizan su puesto para vacunarse. Soy alcalde, tengo ELA, 68% de discapacidad y grado dos de dependencia. No me he vacunado, pero estoy deseando hacerlo. Pero también os digo que tengo miedo de que alguien diga que es por mi puesto”. Y en el mismo comunicado -el vídeo- dice que “hay muchos más políticos que no utilizan su cargo para vacunarse que los que sí lo han hecho”, y ha señalado que él no se ha vacunado contra el coronavirus pero cuando le llamen no quiere que “nadie piense que me han llamado por ser alcalde”.
Pues así sucediera, éste enfermo de ELA con un 68% de discapacidad y grado 2 de dependencia, tendrá todo nuestro apoyo. Y con personas en la situación de él que ostenten cualquier cargo político, sea cual sea su partido, debería priorizarse la vacunación. Entre otras muchas razones porque entendemos que es cuestión de humanidad.