El público se lamenta de una ocasión fallida de gol por parte de la delegación española. (Foto: J.F.)
En torno a 250 personas, incluidos sus tres abuelos, animaron a la waterpolista desde el centro cultural de la localidad.
Javier Fernández | Miércoles 23 de abril de 2014
Una plata con claro sabor a oro fue el metal que finalmente se colgó la selección española femenina de waterpolo en los Juegos Olímpicos de Londres, y entre ellas la navalqueña Pilar Peña. El municipio se volcó tanto con la semifinal como con la final instalando una gran pantalla en la Casa de la Cultura para que siguieran el evento deportivo en torno a 250 personas, entre ellos el alcalde, Manuel Arroyo, y sus tres abuelos, residentes en la localidad. Ánimos no faltaron para todo el equipo de Miki Oca, con incansables gritos de “España”, aunque la máxima emoción se vivía cada vez que la jugadora local tocaba la pelota; “Pili, Pili”, jaleaban los navalqueños.
Después de un primer tiempo prometedor, la españolas terminaron sucumbiendo ante Estados Unidos por 8 tantos a 5, aunque todo Navalcán valoró el Subcampeonato Olímpico de un grupo de nadadoras que representaba por primera vez en la historia los intereses de España. Las norteamericanas estuvieron intratables y quizá las españolas no aprovecharon todas sus opciones, pero lo que quedó patente es el clamor popular por Pili Peña en su pueblo, que estalló de emoción cada vez que ella se hacía con el esférico.
Su abuelo materno, José Carrasco, definió como “extraordinaria” la labor de toda la selección; “han dado una lección a los españoles y al mundo entero”, manifestó emocionado recordando que el sueño de su nieta se había cumplido sólo con ir a esta competición tan especial. El abuelo recordó que Pilar lleva como profesional desde hace 16 años, aunque se inició con seis años en el mundo de la natación. Además, alabó “el esfuerzo, el empeño y el tesón” de todas sus compañeras y avanzó que animará a su nieta a subir al máximo peldaño del podio en Río de Janeiro en 2016. “Yo creo que allí lo va a conseguir”, concluyó. También estuvieron presentes sus dos abuelas: Aurelia Díaz, la paterna, y Eulalia Peña, la materna.
El regidor navalqueño, Manuel Arroyo, dijo sentirse “muy orgullo con la plata de Pilar” y recordó que “hay que perder antes de ganar”, haciendo política ficción de cara a la consecución del oro en Brasil dentro de cuatro años. El alcalde alabó el papel de Peña como boya en el equipo nacional y adelantó que, más adelante, perfilarán un sencillo acto para celebrar la medalla de plata de esta ilustre vecina de Navalcán.
Pilar Peña Carrasco tiene 26 años y compagina su práctica del waterpolo con sus estudios de Magisterio. Aunque nacida en Madrid, viaja a Navalcán siempre que puede, ya que allí están sus raíces y allí tiene aún a sus abuelos. Comenzó su formación en el Club de Natación Alcorcón hasta dar el salto al Club Natación Sabadell Astrapool, que ganó el año pasado la Liga española, la Copa de la Reina y la de Europa. En 2004, tras los Juegos de Atenas, fue llamada para el equipo que clasificara a España para los de Pekín, aunque finalmente no se logró.
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