Son varios los medios que se han hecho eco de la información en la aseguran que las muestras de aguas residuales tomadas de la depuradora municipal de Cuenca -el día 26 de agosto- han vuelto a dar positivo en material genético del coronavirus SARS-CoV-2, e incluso que han aumentado los niveles con respecto a los que se obtuvieron la semana anterior. Desde el consistorio conquense, y a través de un comunicado, se ha indicado que "se trata de una información que supone el reflejo de la evolución de los casos de Covid-19 en la capital, por lo que seguiremos muy pendientes de los resultados que sigan apareciendo".
Al respecto, el alcalde, Darío Dolz, ha pedido, "ahora más si cabe, responsabilidad a todos los conquenses para evitar que una situación que en nuestra ciudad está bastante controlada y con unos niveles aceptables se convierta en un problema como está sucediendo en muchos otros lugares del país. No nos lo podemos permitir". Este muestreo forma parte del proyecto puesto en marcha por los Ministerios para la Transición Ecológica y de Sanidad para la detección de Covid-19 en una treintena de ciudades de vigilancia de aguas residuales como indicador epidemiológico para un sistema de alerta temprana para la detección precoz de COVID-19.