Moisés de las Heras
Irene González Moreno | Miércoles 23 de abril de 2014
Llego a la desoladora conclusión de que, por ridículo que suene, es característica del español, ya sea gobernante, chatarrero o torero de salón, proponer boutades de tal calibre que parecen fantasía.
Yo he llegado a asistir a planteamientos imposibles, conclusiones contradictorias, decisiones inconcebibles de gente que, tras soltar el disparate, se ha quedado tan fresca. ¿Puedo haber escuchado alguna vez a un tartamudo soñar con ser locutor? Lo juro, por mi mp3 que se escachifolle. Y juro por mi gps de mechero que he asistido atónito a proyectos de macdonalds en Cuba, librerías en Kandahar o un secretario de mancomunidad de municipios que se metió bajó el chasis de un camión con una cucharilla de café a ver si lo arreglaba, o similares. El español es incoherente e incapaz de prever. Puede proyectar tan frescamente un viaje para mañana de madrugada y saber que tiene el coche roto, con dos narices.
Ahora la DGT pretende ahorrarse unos céntimos bajando temporalmente el límite de velocidad. Supongo que habrán echado cuentas del ahorro, lo habrán multiplicado por los coches que circulan, restado la inusitada inversión en pegatinas (¡pegatinas, santo Dios!…) e imagino habrán pensado en el puñetero caso que les vamos a hacer, en la diversión de arrancar plásticos y en que, si hay sanción por seguir a 120, se van a cubrir de gloria. Acaso recaudarán en multas, eso sí, pero la fama que ha de coger el gobierno ni te cuento. Sacan la ley antitabaco en plena crisis y ahora esto… y quiero creer que han hecho los oportunos deberes, estimaciones psicológicas o sociológicas de la medida, que hay un multiplicar y sumar céntimos coherente, un plan de sensibilización efectivo, -¡que nosotros no somos suizos, coño, sino italianos!-. Al parecer funcionó en otros países, pero lo dudo en un país de locutores tartamudos y de lumbreras que venden anoraks en Waikiki.
Por cierto, ¿cuánto ahorraremos? El equivalente a un traje de Camps o a una cena de Pajin. Por no hablar de caballos…