Escucho como cada día la tertulia de la radio en mi cocina y no salgo de mi asombro ante una de las noticias que comentan.
Una delegación del gobierno iraní, visita nuestro país y cambiamos los protocolos de saludo porque ésta gente, o sea, los iraníes, no saludan a las mujeres. Sí, pero dejen que me explique. Como los iraníes no saludan a las mujeres, la presidenta de nuestro Congreso de los Diputados toma una decisión salomónica y decreta que nadie salude a nadie…matando al perro, se acabó la rabia.
Aquí vendría una cara de asombro, porque resulta que ésta decisión la toma después de que Vox (los machistas de la película) hayan denunciado públicamente la falta de respeto de los iraníes hacia las mujeres españolas.
¿Qué me dices? Pues sí, Vox dice que no acudirá a la recepción debido a la discriminación machista de los iraníes. Y es que las cosas del protocolo, cuando se refiere a alguno de estos países no funcionan. Si ellos dicen que no saludan a las mujeres, no lo hacen y punto. Somos nosotros quienes tenemos que adaptarnos a ellos, aunque sean los visitantes, que son los que deben adaptarse al país que visitan.
Pero nuestras feministas (a las cuales no he oído rechistar) dejan de serlo cuando algún musulmán se cruza en el camino.
Pues no señoras, estamos en España y aquí cualquier delegación extranjera debe acoplarse a nuestras normas y no al contrario.
Y es curioso porque la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, de izquierdas, se supone que feminista reconocida, (ya veo yo que de postureo más bien) debía haberse plantado y en conciencia no permitir que ésta delegación ponga sus normas en nuestra casa.
Y luego viene el otro capítulo, Vox, acribillado públicamente como machista, resulta ser el único partido que denuncia públicamente la notoria discriminación de Irán hacia las mujeres de este país. Y ningún partido más lo ha hecho, dónde están las de Cs, PP y podemos, las de los “gallos violan a las gallinas” las defensoras de los derechos de la mujer en un país en el que ya están todos recogidos en nuestra CE…y vienen los iraníes a visitarnos y resulta que tenemos que ceder ante ellos porque no quieren dar la mano a las MUJERES, feministas de pacotilla es lo que sobra.
Me pierdo y no me encuentro, coherencia y sentido común pido, aunque creo que esto, desgraciadamente, también está en recesión, como nuestra economía.