El mismo guión

Aunque con distinto escenario,Talavera y Torpedo 66 repitieron en la tarde del pasado domingo en Cebolla el mismo guión del encuentro disputado durante la primera vuelta en el 'Zarra'. Es decir, partido de excesivo respeto entre jugadores que se conocen al dedillo con muy pocas ocasiones que se decanta del lado blanquiazul otra vez con un tanto penalti muy discutido por la parroquia albinegra.

Tanto locales como visitantes abusaron durante el primer tiempo del pelotazo y los balones altos y las ocasiones de gol brillaron por su ausencia. Tanto es así que un remate de cabeza de Monescillo tras un excelente pase de Gerardo desde el costado izquierdo que se perdió alto y un disparo lejano de Manasé que a punto estuvo de sorprender a César fueron las únicas oportunidades reseñables de las que disfrutaron ambas escuadras.

La tranquilidad en las áreas no se hizo extensiva al resto de parcelas del terreno de juego y, aunque el juego no estaba siendo excesivamente bronco, la intensidad con la que se emplearon unos y otros provocó que Díaz de Mera se empleara a fondo con las cartulinas cargando, quizá en demasía, la nómina de tarjetas de los cebollanos, quienes acumularon hasta ocho durante todo el partido por tres de los talaveranos.

Tras el paso por vestuarios los de Fran Sánchez tomaron las riendas del choque acabando con la igualdad que imperó durante el primer periodo y, mostrando su cara más ofensiva, comenzaron a ser cada vez más frecuentes las visitas a la meta de César. Borja Lafuerza con un lanzamiento envenenado que se marchó fuera y Aarón con una mano a mano bien respondido por el meta local fueron los avisos más claros de los blanquiazules.

Por su parte, el Torpedo trataba de sacudirse el dominio visitante con el que había comenzado la segunda mitad y disfruto de una ocasión del veterano Machuca, que había salido minutos antes, que se marchó por encima del larguero defendido por Ángel Luis. Con este panorama y a falta de un cuarto de hora para el final de la contienda, el colegiado decretó la pena máxima por unas manos de Goro dentro del área en una decisión que fue más que protestada por los de Cebolla y que les dejaba con diez hombres ya que la acción le costó la segunda cartulina al jugador local. Tirando de galones, Bayarri asumió la responsabilidad y convirtió con sutileza ajustando el balón al palo derecho y salvando la gran estirada de César. Un tanto que vale tres puntos para los talaveranos y les permite seguir la estela de un Mora que se mantiene intratable en el liderato y que sigue aventajando a los de Fran Sánchez en cuatro puntos. El Torpedo, por su parte, rompió con una racha de seis partidos sin conocer la derrota y continúa instalado en la zona media de la tabla.