Desde que el pasado 12 de febrero saltara la noticia del cierre provisional del matadero de Talavera de la Reina, con un cartel que indicaba que en ‘quince días’ se reabriría (han pasado casi 40), nada se ha sabido sobre el particular.
La portavoz municipal María Rodríguez, en rueda de prensa, aseguró que no tenía información oficial por parte de ninguna administración sobre esta situación y el concejal de Economía, Arturo Castillo, en redes sociales, afirmó que desconocía si la empresa que gestiona la instalación está al día en las ordenes de pago por el canon que corresponde al cesión del servicio.
La empresa que gestiona por concesión el Matadero, Ganados y Productos Industriales SA (Gypisa) recibió esa primera semana de febrero la visita de expertos sanitarios de la Oficina de Alimentación y Veterinaria (FVO) adscrita a la Comisión Europea para realizar una 'auditoria' y al no cumplir lo requisitos sanitarios oportunos, la empresa recibió el 12 de febrero la orden de la Dirección Provincial de Sanidad de su cierre. Pero no había sido la única visita de inspección que se había girado a estas instalaciones desde el año 2001, en que comenzó su actividad. A lo largo de este tiempo se han llevado a cabo numerosas visitas de inspectores sanitarios que avisaron de la falta de idoneidad del Matadero.
Según informaciones contrastadas por este medio, se baraja la posibilidad de la reapertura en las próximas semanas, ya que se están llevando a cabo labores de limpieza y adecentamiento del edificio tales como pintura de los muros, reposición de red eléctrica y de fontanería, así como adecuación de las zonas estancas para evitar las contaminaciones cruzadas. Eso sí, no se tiene noticia de la sustitución, por ahora, de la maquinaria que se utiliza en las líneas de producción debido a que ello supone un desembolso considerable (en torno al millón de euros por cada una).
De hecho, poco antes del cierre ya se habían paralizado las líneas dedicadas al ganado vacuno y ovino, dejando activa una sola línea de porcino de las tres que inicialmente estaban funcionando.
Ahora surge la duda de si Gypisa seguirá ostentando la concesión, tras los problemas acaecidos, o será otra empresa –tras la decisión municipal al respecto– la que lleve a cabo la gestión. Por ahora, el Ayuntamiento sigue sin ofrecer información al respecto. Eso sí, el pasado lunes 18 de marzo se desarrolló una reunión de junta de portavoces en que se tocó el asunto sin que haya trascendido nada sobre una posible solución.
PLANTILLA BAJO MÍNIMOS
El cese de la actividad del Matadero de la Ciudad de la Cerámica, que daba servicio a alrededor de 25 explotaciones ganaderas y salas de despiece de la comarca, se agrava con un Expediente de Regulación Temporal de Empleo que comenzó a producirse el pasado 1 de marzo y que afecta a 17 trabajadores, así como nueve despidos que ya se han producido, algo que deja tan sólo a 4 personas en plantilla, cuando en el mejor momento llegaron a integrarla 38 trabajadores. Cabe reseñar también que las 8 personas que componían la empresa dedicada a las labores de casquería, integrada en el matadero, han sido despedidas.
A la vez, los perjuicios para las empresas cárnicas de la zona puede estar siendo considerable entre las que destaca la talaverana Deraza Ibérico, que suponía el 90% del trabajo para el Matadero con el proceso de en torno a 650/800 cerdos ibéricos diarios. Deraza Ibérico cuenta con más de 250 trabajadores.
A la vista de toda esta situación controvertida, ¿qué pasa con el matadero?