M. Bravo Carrillo
David Martínez | Domingo 10 de marzo de 2019
Los tres puntos, y los resultados de la jornada, permiten al CF Talavera dar un paso importante para conseguir la permanencia en un choque de lo más cómodo de esta temporada en casa.
Un magnífico zurdazo de Cristian, cuando el crono se aproximaba al minuto 40, le bastó al once de Fran Alcoy para sumar los tres puntos frente a un Real Murcia inoperante, desestructurado en todas sus parcelas y sin algún sistema futbolístico que ofrecer no ya para sacar los tres puntos en cualquier campo, sino tan siquiera para poder equilibrar la balanza cuando va perdiendo. Insolvente, en suma, en lo deportivo, que en lo demás… ni entramos ni salimos. Esa, y no otra, fue mi impresión a lo visto, pero que cada cual dé la suya. Tres puntos que acercan a los blanquiazules a los objetivos desde que está en liza la segunda vuelta: la permanencia.
Talavera y Real Murcia, separados únicamente por tres puntos entre ellos, favorables a los visitantes, afrontaban su partido de este caluroso domingo de marzo con un idéntico objetivo: sumar para intentar lo más rápidamente posible alcanzar los 48 o 50 puntos que permitan tranquilidad absoluta en lo que resta de calendario. Bien es cierto que en la situación extradeportiva tenía en ventaja a los talaveranos, porque institucionalmente el histórico Real Marcia se asemeja a “la casa de los líos”, dicen por allí. Pero en lo deportivo se daba bastante similitud, si a hombres disponibles nos referimos. En los de Alcoy las lesiones han hecho una merma considerable y en los pimentoneros, los recortes invernales (ocho bajas y solo tres altas) y las sanciones son un lastre a tener en cuenta, además del baile de entrenadores porque el actual, Javi Motos, viene del Imperial (filial murciano) a ocupar la plaza del destituido Manolo Herreros. Añadan a todo, el dato objetivo de que llevan siete semanas sin sumar tres puntos. Con todo, ambos ya sabían de la derrota del Villanovense y de que Benito y Sanluqueño habían empatado entre sí. De inicio, menos “agobios” para los dos.
¿Quién pierde más?
Sin Juanra, Jonxa, Rubén que al final ocupó plaza en el banquillo, Ismael y Óscar Martín, más el sancionado Espinar, Fran Alcoy debía afrontar el choque casi con lo justo. Enfrente, tan sólo 17 hombre disponibles y tirando de la cantera, como en el caso de Víctor Meseguer, que es el noveno que utilizan en esta campaña, dado que a los sancionados Forniés, carrilero, y el mediocentro Miñano se sumaba durante la semana el central Charlie Dean, con rotura de fibras en el recto anterior derecho, uno de los mejores jugadores de la plantilla. La respuesta a nuestra pregunta tendría respuesta en cuanto el balón echase a rodar.
Y así lo mandó el colegiado madrileño para que unos y otros dieran rienda suelta a sus virtudes, su imaginación o a las consignas provenientes del vestuario. Con Víctor Andrés de la partida -hoy Fran vivió una de las tardes más tranquilas de esta campaña- y Rodellar en el tono de siempre, la gestión del juego comenzaba a tener signo local, pese a que el primer disparo -o lo que fuera- del choque fue de color pimentonero. Con la dirección que tomó el esférico se intuía una tarde apacible para Gianni, como así sucedió. Y ya sin exquisitez alguna, los de Alcoy fueron tomando posiciones sin especular y con menos horizontalidad que otras veces. Un remate fallido de San José, una mano de Mackay a centro chut de Oca y varios saques de esquina en el área rival, fueron la antesala de lo que sucedería en el minuto 39, cuando Cristian empaló un magnífico disparo al que no llegó el meta murciano. Era el 1-0 y el conjunto visitante sin aparecer salvo para que Silvente se llevara la amarilla.
El descanso sirvió para que Javi Motos no arriesgara y “castigara” a aquél dejándole en vestuarios por Jeisson. Lo que podría dar la sensación de riesgo murciano quedó en pura especulación para el cronista, porque nada cambió. El Real Murcia demostraba no jugar a casi nada, salvo a que sus jugadores se quitaran el cuero de los pies a la menor ocasión. Con apenas siete minutos el CF Talavera recibía el primer revés de la tarde. Pro no, no se asusten, que nada tuvo que ver el equipo pimentonero: Oca pisó mal y se produjo un esguince en el pie derecho que le llevó en brazos al vestuario. Sedeño tomó el relevo y eso permitió a Melchor avanzar posiciones, con lo que entre éste y Molinero gestaron las mejores jugadas blanquiazules del choque, aunque ninguna encontró rematador. Y cuando así sucedió, Carralero Calvo no dio el visto bueno, pero el remate de Nandi lo atrapó el meta murciano en la línea de meta o, incluso, dentro. Pero aquí no hay Var. Protestó el público y el entrenador visitante, contra los suyos claro, que tras esto volvió a tirar de banquillo. Pero ni por esas se puso en peligro la integridad cerámica. No había forma de romper el medio centro local, donde para reforzarlo Alcoy echó mano de Reguera por Cristian, que segundos antes había estorbado a Iker Rodellar en una remate franco de cabeza. Y como estaba todo casi sentenciado, por la inoperancia visitante, Fran Alcoy regaló los minutos de la basura al juvenil Dorado, que para eso había acudido la familia. Tocó hasta tres balones en los dos minutos que estuvo, y no lo hizo un cuarto porque Laerte no debió “fiarse mucho” del chaval, le robaron el balón y, curiosamente, originó la única zozobra para Gianani en 94 minutos de partido. Cosas del fútbol.
CF TALAVERA: Gianni, Melchor, Madrigal, San José, Nandi, Rodellar, Oca (Sedeño 52’), Víctor Andrés, Laerte, Abel Molinero (Dorado 91’) y Cristian (Reguera 78’).
REAL MURCIA: Mackay, José Ruiz, Armando, Nahuel, Sergio Maestre, Hugo Álvarez (Victor Curto 66’), Josema, Juanma, Manel, Miguel Díaz (Chumbi 51’) y Silvente (Jeisson 46’)
ARBITRO: Carralero Calvo con Ramos García y García González). Colegio Madrileño. Cartulinas a los locales Víctor Andrés y nadi, y al visitante Silvnte.
GOLES: 1-0. Minuto 39. Zapatazo de Cistian con la zurda al borde del área
INCIDENCIAS: Municipal El Prado tarde soleada y buena temperatura. En torno a los 1000 espectadores en media jornada económica. Terreno de juego algo más mejorado, en apariencia y electrónico, por fin, a pleno rendimiento.
TEMAS RELACIONADOS:
Noticias relacionadas