Hace unas fechas se hacía visible la propuesta conjunta de los ayuntamientos de Talavera, Cazalegas y Pepino por llevar a cabo la que es antigua reivindicación sobre el desdoblamiento de la antigua N-V. Una propuesta en la que los tres alcaldes de los citados municipios apuestan por una cofinanciación en la que entrarían en juego, junto a los respectivos consistorios municipales, las aportaciones económicas de otras administraciones como el Ministerio de Fomento, la Junta de Comunidades de Castilla – La Mancha y la Diputación de Toledo.
En esta línea, el primer edil pepinero, Inocencio Gil Resino “Cito”, defiende la ejecución de esta obra civil “pues iría en beneficio de medio millar de vecinos de las urbanizaciones de Pepino que, de este modo, tendrían un mejor y más directo acceso a la principal vía de entrada y salida a la vecina Talavera”. En concreto, los núcleos residenciales a los que se refiere el alcalde de Pepino son las urbanizaciones de Soto del Espinosillo, Los Manzanos, Las Parras y Ferrocarril Sur que, por proximidad, serían las principales beneficiarias de este desdoblamiento.