El presidente de Castilla-La Mancha se ha mostrado optimista respecto a la postura del nuevo Gobierno central en relación a la política hidrológica a nivel nacional y la posible consecución de un pacto nacional sobre agua “que la nueva ministra está empezando a girar”.
Redacción La Voz del Tajo | Viernes 13 de julio de 2018
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha lamentado la derivación de 38 hectómetros cúbicos aprobada el pasado miércoles por la Comisión de Explotación del Trasvase Tajo-Segura para el mes de julio y ha adelantado su recurso por parte de los servicios jurídicos de la Junta de Comunidades.
Así lo ha adelantado el jefe del Ejecutivo autonómico desde Villamalea (Albacete), donde este viernes ha presidido el acto de presentación del proyecto y colocación de la primera piedra del edificio de Educación Primaria del CEIP ‘Ildefonso Navarro’.
“Si alguien está esperando que cambie mi discurso sobre agua porque haya cambiado el Gobierno de España, se equivoca”, ha subrayado el presidente de Castilla-La Mancha, quien ha asegurado que esta nueva derivación “me ha sentado igual de mal” que las aprobadas por el anterior Ejecutivo central.
“Es injusto”, ha hecho hincapié García-Page, quien ha remarcado su posición favorable a alcanzar un acuerdo en materia de agua en España, contando con el consenso de todos. “No estoy en una posición fanática”, ha remarcado el presidente regional. “Si alguien defiende los trasvases –yo no–, está en su derecho”, pero “si el problema del agua se va a arreglar con trasvases, entonces de todos los ríos, porque el único que está en marcha se hizo con Franco”.
“Me gustaría saber qué se diría” si se propusieran hoy en día trasvases en otros territorios y se comenzaran a plantear derivaciones hídricas desde “el Ebro o el Duero”, ha reflexionado el presidente de Castilla-La Mancha.
Del mismo modo, ha lamentado que, pese a la disponibilidad de otro tipo de recursos, el debate haya abocado a “que nos estemos peleando” entre comunidades a las que les falta el agua, caso de Castilla-La Mancha, cuyo significado etimológico es “la seca”.
OPTIMISMO DE CARA AL FUTURO
Con todo, el presidente regional se ha mostrado optimista en cuanto a la postura del nuevo Gobierno de España en materia hídrica y de trasvases. “Las palabras que he escuchado a la nueva ministra, me gustan”, ha aseverado García-Page, quien ha valorado que “después de muchos años” comience a “sintonizar con una nueva música del Ministerio, que ha puesto más matices a la injusticia del trasvase”.
En la misma línea, se ha mostrado esperanzado en que “si somos firmes con los trasvases injustos”, Castilla-La Mancha logrará “un nuevo acuerdo en materia de agua”. García-Page ha subrayado, asimismo, la importancia de que en España no falte agua para beber o para la industria, “pero en regadío, que es el 90 por ciento de la gestión del agua en España, las cosas espero que vayan de otra manera”. En este sentido, el presidente regional ha recordado que los 600 millones de euros invertidos en las desalinizadoras del Levante “deben convertirse en la norma”.
En otro orden de cosas y, enlazando con el proyecto de construcción del nuevo edificio de Educación Primaria en Villamalea, el presidente de Castilla-La Mancha ha afirmado que él “es responsable de la enseñanza pública en la comunidad autónoma y somos la región con menos enseñanza concertada, simple y llanamente, porque se ha desarrollado mucho la pública y porque no existía ni concertada, ni privada”.
“Creemos en la enseñanza pública, pero no a costa de la concertada, y el Gobierno regional cumplirá sus compromisos con la enseñanza concertada”, ha asegurado.
El presidente del Ejecutivo autonómico también ha apuntado que “quiero que convivan los dos y, donde no se llegue, siempre haya pública, pero no quiero rechazo entre ambas” porque el educativo es un ámbito “donde debe haber pacto y convivencia”.
A continuación, el presidente de Castilla-La Mancha, acompañado del consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha realizado una visita a las instalaciones de la cooperativa ‘Champinter’, especializada en el cultivo, producción y comercialización de productos micológicos y conservas, industria para cuyo desarrollo es “indispensable” el agua.
TEMAS RELACIONADOS:
Noticias relacionadas