Redacción La Voz del Tajo | Miércoles 23 de abril de 2014
Un jurado popular consideró que el conductor kamikace de 56 años es culpable de tres delitos de homicidio al causar la muerte a un niño y sus abuelos en un accidente de tráfico que produjo al conducir ebrio en sentido contrario por la A-5 a la altura de Maqueda (kilómetro 73,8). La condena estimada es de entre 12 y medio y 15 años. Siete votos a favor y dos en contra decidieron que el acusado era consciente del peligro que conllevaba su actuación cuando cogió el coche con una tasa de alcohol en sangre cinco veces por encima de lo permitido y persistió en su actitud pese a las indicaciones que le hicieron otros conductores. De esta forma el jurado decide que se aplique el delito más grave, propuesto por la fiscalía y la acusación particular, calificando los hechos como un delito de 'conducción temeraria con consciente desprecio para la vida de los demás en concurso con tres delitos de homicidio'.
El presidente magistrado del jurado pidió la pena máxima para el acusado, Guillermo L.G.H., y profesor en Talavera, por conducir en sentido contrario durante diez kilómetros con un tasa de alcohol de 2,46 gramos por litro de sangre. El abogado de la defensa anunció que recurrirá la sentencia emitida, estimando que su cliente es culpable de un delito de homicidio imprudente, una pena que e castiga con un máximo de cuatro años.
Los hechos ocurrieron a las 20:30 horas del 3 de julio de 2007 en el sentido Madrid-Badajoz de la A-5, cuando el Ford Mondeo del acusado chocó con un Ford Laguna en el que viajaban Miguel Ángel Peralta, de tres años, y sus abuelos maternos Santiago Navarro y Milagros Buitrago, de 68 y 67 años, respectivamente. Los tres murieron en el acto cuando se dirigían a San Esteban del Valle (Ávila) para pasar sus vacaciones. El padre del niño fallecido se mostró de acuerdo con el veredicto mientras que el acusado pidió perdón a la familia de las víctimas y afirmó no recordar lo sucedido.
Noticias relacionadas