David Martínez | Miércoles 23 de abril de 2014
La Audiencia Provincial ha absuelto al agente de la Policía Local de Talavera que se enfrentaba a cuatro años de prisión y ocho de inhabilitación por un delito de falsedad en documento oficial y prevaricación según las conclusiones del Ministerio Fiscal y la acusación particular. Según las informaciones previas, el denunciado había multado equivocadamente por ruido al propietario de un vehículo que en ese momento estaba en el concesionario. La sentencia recoje que el tribunal considera como hechos probados que el policía se dirigía el 29 de agosto de 2008 a su casa, en la Urbanización Chaparral Bajo, en vehículo oficial con otro compañero. Al llegar escucharon el sonido repetido del claxon de un coche. Éste creyó reconocer la furgoneta y a la conductora por ser vecina de la misma calle y la multó, ateniéndose a la Ley de Seguridad Vial, por hacer un uso exagerado de las señales acústicas.
La conductora se marchó antes de que los agentes llegaran hasta ella, aunque este policía, José Manuel V., emitió el boletín para sancionarla. Como titular del vehículo aparecía el marido de esta mujer. El agente anotó la matrícula que le ofreció el Servicio de Gestión de Tributos Municipal, una furgoneta de la marca Citröen, pero ese vehículo se encontraba desde hacía un mes en el concesionario. El dueño había cambiado esa furgoneta por otra similar, que fue la que vieron los policías. El tribunal se basa en la absolución en que “el acusado no era consciente de estar alterando la verdad” y que el agente “no tenía conciencia de y voluntad de hacerlo”.
La acusación particular mantuvo en su declaración la enemistad existente entre ella y el agente.
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