Playa de los Arenales, Talavera de la Reina. Cualquier día de esta semana, 16:00 horas.
Un bañista en busca de frescor que otorga la extensión habilitada por el Ayuntamiento junto al río Tajo se toma la mayor de las licencias en público, desnudarse.
Las lindezas corporales de este individuo, de sexo masculino, se exhibieron al sol sin ningún tipo de recato. Su imagen por supuesto ha sido pixelada para salvaguardar cualquier indicio de su identidad, a la vez que hemos 'tapado' sus partes pudendas en previsión de que puedan ser vistas por menores, que también acuden a esta zona de recreo público y pudieron haberse encontrado con esta persona sin ropa.
Como mínimo, sorprende la naturalidad con que allí se presentó el ínclito, la templanza para desnudarse en un lugar de uso público y donde, según hemos podido corroborar con las autoridades competentes, no se permite el nudismo.
Dejamos a nuestros lectores la posibilidad de 'echar a volar' la imaginación para saber cuáles eran las intenciones del interfecto, que muy probablemente no irían más allá de pasar un rato agradable bajo el prisma de la mayor de las libertades de las que puede gozar un ser humano, deshacerse de cualquier atadura de la moda en estos tiempos estivales en los que el calor ataca de tal manera que algunos buscan en la desnudez su mayor gratificación personal.