Y ahora resulta que es una “peccata minuta” para lo que nos están transmitiendo últimamente todos los medios de comunicación con el tema de los atentados de Paris. La amenaza terrorista de los yihadistas se ha superpuesto sobre la independencia de Cataluña y ahora apenas dedican unos segundos, o bien unos pocos folios si se trata de prensa escrita, para hablar de ello. Desde luego no me cabe la menor duda que es más importante el tema de los terroristas y, sobre todo, mucho más dramático para la mayoría de la gente, claro está…, pero ahora a simple vista parece que a los españoles ya nos da igual si se independizan o no… Casi nadie se acuerda de cómo está el tema… y yo creo que no dejará de tener una gran importancia lo que se vaya a determinar allí en Cataluña..., no os parece ¿mis queridos lectores? Yo creo que, sin dejar de tener la mirada en lo que ocurra en Europa, no debemos descuidar nuestros deberes patrióticos para mantener la España unida…Y seguramente que lo estarán haciendo nuestros gobernantes, no me cabe la menor duda, pero nos lo deberían seguir transmitiendo a todos los españoles… Tal vez de una forma… “ni tanto ni tan calvo”, como diría el pintor, pero sí hacerlo con puntualidad y claridad suficiente como para seguir bien informados todos los ciudadanos de acá, de los pasos que se vayan a tomar en cada momento… pues si en alguna ocasión llegara a ocurrir la separación sin el consentimiento de todos los españoles, sería una deshonra que no nos la perdonaríamos con el correr de los tiempos… pues, ahora mismo, o nos están engañando o no se debe llevar a cabo tal felonía… según nos cuentan que dice la Constitución Española, no? Y es que yo ya no me fio de nadie… porque los políticos, “donde dicen digo, después son capaces de decir diego”… y se quedan tan anchos…
Pero, vamos, que los cambios en pocos minutos se dan no solo en las informaciones que nos transmiten los medios de comunicación…, también se llevan a cabo en otros muchos ámbitos de la sociedad, como, por ejemplo, en empresas que se llaman punteras y muy potentes…(¿Tal vez Abengoa?) y que de la noche a la mañana… se caen como hojas marchitas… ¿Cómo puede ser que esas grandes multinacionales que se ven tan potentes…, en pocos minutos tengan unas caídas tan caóticas…? Para mi amigo Pepe son como castillos de arena… ya que se apoyan sólo en el papel…; son construcciones que no tienen consistencia en su formación y desarrollo…, por mucho que aparenten ser de hierro… sólo mantienen el color del oro, pero por dentro están huecas…(deben ocho o nueve mil millones….). Lo malo es que esas grandes empresas, cuando son fuertes, se guardan para ellas las ganancias, pero cuando flaquean echan mano de los demás… para que las ayuden en su naufragio…; y no debe ser así… pues en tiempos de vacas gordas, deberían guardar para los tiempos de vacas flacas…, tal y como dice mi amigo Pepe…