El candidato a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha por Podemos, José García Molina, inició la campaña electoral en Talavera de la Reina, ciudad en la que vive y trabaja, asegurando que en estas semanas previas a los comicios “van a significar un cambio, un hito en la historia política de la región, con la irrupción de Podemos y de una cierta pluralidad de fuezas que vienen a cambiar la dinámica del bipartidismo”.
A su juicio, “la contienda este año será más intensa e interesante que en otras ocasiones anteriores” y dijo que estas elecciones se jugarán a “partido de ida (24M) y vuelta (generales en otoño)”. García Molina manifestó que más de la mitad de la población está indecisa en su intención de voto, por lo que seguirán contando con el trabajo y la ilusión de la gente, porque “hemos demostrado, en muy poco tiempo, que las campañas se nos dan muy bien”.
Con esta premisa, el candidato de Podemos aseveró que: “estamos convencidos de que en este tiempo vamos a conseguir que muchos indecisos tomen conciencia de que Podemos es el voto del cambio, para que cambien las cosas en la región y en sus ciudades y municipios”.
Respecto a Talavera, el líder regional de la formación dijo que: “quiero a esta ciudad, que siempre ha sido la gran olvidada de la región”.
Sobre sus inicios en política, García Molina dijo que cuando se decidió a dar el salto escuchó unas declaraciones de García-Page en las que decía que “Talavera necesitaba un electroshock”, algo que él entendió como un ‘lapsus’. A su manera de entender, “las ciudades y el país no necesitan descargas, sino un cuidado y mimo que Podemos ha entendido en su lógica de hacer política”. Sobre otros ‘lapsus’, el candidato también recordó las palabras en las que la presidenta Cospedal dijo que “habían trabajado duro para saquear el país”, aunque en ambos casos se mostró convencido de que quisieron decir otra cosa.