Víctor Manuel Martín, director general adjunto de Caja Rural de CLM, en la presentación en París. (Foto: LVDT)
El trabajo elaborado por la Cátedra de la Fundación de Caja Rural de Castilla-La Mancha incluye pautas claves para una adecuada planificación y toma de decisiones en los procesos de internacionalización de las cooperativas.
Redacción La Voz del Tajo | Miércoles 23 de abril de 2014
La Cátedra de Estudios Cooperativos de la Fundación de Caja Rural de Castilla-La Mancha ha representado a España en París en la VII Conferencia Internacional de Dirección Estratégica, que bajo la organización de la Universidad Beykent de Estambul, ha acogido a 250 investigadores de países como Malasia, India, Turquía, Francia, Reino Unido y Letonia.
Encabezada por el director general adjunto de Caja Rural de Castilla-La Mancha, Víctor Manuel Martín López, y con la colaboración del jefe de Estudios, Análisis y Prospectiva de la Fundación, Ignacio Ruiz Guerra, la Cátedra presentó en este foro un trabajo basado en las pautas estratégicas que han de regir las decisiones de las cooperativas agroalimentarias al planificar sus intenciones de internacionalización en los mercados.
Durante la exposición del estudio, el equipo resaltó la importante evolución de los sectores vitivinícola y oleícola de Castilla-La Mancha, líderes en producción de vino en la Unión Europea y segundos en elaboración de aceite de oliva en España. También subrayaron la decidida apuesta por la calidad llevada a cabo por las cooperativas agroalimentarias, hecho que ha quedado demostrado en los últimos años por el aumento del reconocimiento a su labor.
Los miembros del equipo de investigación de la Cátedra de Estudios Cooperativos, que la Fundación de Caja Rural de Castilla-La Mancha tiene en convenio con la Universidad de Castilla-La Mancha, incidieron como aspecto relevante en la necesidad de modificar el modo de trabajar para ganar el futuro, no sólo apostando por la calidad, sino también estableciendo otras medidas que afecten al sector de manera estructural.
En este sentido, apuntaron a la colaboración de las cooperativas -uno de los principios fundamentales auspiciados por la Asociación de Cooperativismo Internacional (ACI)- como pilar básico para el desarrollo del movimiento cooperativo y la supervivencia de los valores del campo castellano-manchego. Al respecto, señalaron la necesaria intercooperación entre Administraciones Públicas y privadas para propiciar un cambio estructural en el campo y ganar con ello competitividad en los mercados.
Buena acogida del estudio.El modelo fue acogido de buen grado por los profesores universitarios allí presentes, quienes añadieron sugerencias al mismo, dado que los problemas en el sector agrícola en Castilla-La Mancha son extrapolables a muchos otros lugares del planeta.
Con la presentación de estos estudios, la Cátedra de Estudios Cooperativos fomenta nuevos modelos y líneas de trabajo que sugieren medidas y cambios sectoriales para la mejora de la calidad de vida de la sociedad y, sobre todo, para el desarrollo del medio rural de la región.
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