José María Arroyo emprende un nuevo peregrinaje, aunque esta vez lo hace con un motivo o vocación diferente a las anteriores. El peregrino de Talavera, por excelencia, prometió que si la joven que recibió un disparo en la cabeza en la calle Alfares el pasado 9 de julio, Ángela Sánchez Oliva, salía adelante, caminaría a pie hasta el Santísimo Cristo de la Vera-Cruz de Urda.
Una vez que la chica -natural de Talavera y vecina de Los Navalmorales- ha recibido el alta y continuará su recuperación en casa y en las sesiones de rehabilitación, Arroyo se ha marcado la hoja de ruta con partida desde Alberche del Caudillo hasta Urda, sin olvidarse nunca de pasar antes por la Basílica de la Virgen del Prado.
El miércoles 20 de agosto saldrá de Alberche para finalizar en Los Navalmorales; el 21 saldrá de Los Navalmorales para concluir la jornada en Menasalbas; el 22 Menasalbas-Los Yébenes; y, finalmente, el día 23 saldrá desde Los Yébenes para llegar a Urda. Allí, escuchará misa y agradecerá a Santísimo Cristo la mejoría de Ángela, asegurando que “el día 10 de agosto fui a visitarla a Los Navalmorales y ya sube y baja las escaleras de casa de sus padres”.
Hay que recordar que son archiconocidos los peregrinajes de José María hasta varios puntos de la geografía española, entre los que destaca el que realizó en 2007: Roma-Lourdes-Santiago-Fátima, completando a pie toda la ruta y presentándose ante la patrona de Talavera con el reto conseguido. Su objetivo siempre ha sido el de llamar la atención entre la sociedad para que se investigue más sobre la enfermedad de la Esclerosis Múltiple, dolencia que afecta a su hija Belén desde hace años.