Nueva andadura

El ‘cambio tranquilo’ que están protagonizando Gonzalo Lago y José Francisco Rivas está siendo un ejemplo para el resto de la clase política regional y nacional.

El contacto entre los lugartenientes de uno y otro no está suponiendo ningún incendio -como ocurre a nivel regional con cargo a las cuentas que parece ser que deja el Gobierno Barreda tras varias legislaturas monocolor-. La última noticia al respecto la ofrecía el nuevo Alcalde al haber encargado a su concejal de Hacienda que realice una auditoría interna para conocer el estado de las cuentas públicas talaveranas que administraba el saliente Carlos Angel Devia. No se atisban estridencias aunque cada uno en su casa tiene un prisma con el que mirar la luz del sol y -en éste y otros muchos casos- sobre las sensaciones dérmicas, nada se puede aventurar.

Las primeras medidas de Gonzalo Lago al frente del Consistorio de la Plaza de Pan van encaminadas a ahorrar en sueldos públicos, tanto de concejales liberados como de cargos de libre designación, aunque aseguraba -en una entrevista que le realizábamos horas antes de tomar el bastón de mando de la Ciudad de la Cerámica- que él y su equipo no vienen ‘a romper nada, sino a construir’, con lo que los proyectos en marcha o por comenzar que sean beneficiosos para la ciudad no tienen por qué echarse a la papelera.

Si el ‘buen rollito’ continua, es probable que Talavera -por fin- tire adelante y se llegue a convertir en lo que merece, por justicia.