Un matrimonio californiano falleció el mismo día después de haber permanecido durante 61 años unidos en matrimonio. Estuvieron juntos casi hasta al final de sus días, ya que solo les separaron cuatro horas para abandonar la vida terrenal. Ella, Maxine, falleció con su marido al lado, mientras que éste le cogía de la mano. Cuando se llevaron el cuerpo del dormitorio y volvieron a comprobar el estado del viudo, éste también había muerto.
Los dos cayeron enfermos en la misma época, él debido a una caída doméstica y ella vio como se agravaba el cáncer contra el que llevaba luchando desde hacia años. No es la primera vez que trascienden noticias de este tipo, ya que otra pareja de Estados Unidos falleció el pasado mes de abril con 15 horas de diferencia. Estos son ejemplos de que hay parejas a quien ni siquiera la muerte es capaz de separar.