RINCÓN SOCIAL
¿Quizás sean hijos/as Mal-Educados, porque tuvieron padres/madres Mal-Educados para su función?
Gabriel Cano | Miércoles 23 de abril de 2014
Con este título tan y tan, complicado, y más cuando queremos escribir y exponerlos en un artículo tan corto, es empresa ardua y difícil, aunque puede que todo junto, es el resultado de muchos jóvenes en la actualidad, y de muchas familias.
Quizás deba empezar por la educación, o mala educación, ...
...para empezar a desentrañar el sentido del artículo. Todo nace de las conversaciones entre profesionales, y de cómo ahora vemos una juventud, que desde mi punto de vista, ha perdido los valores educacionales, y porque no decirlos, son MalEducados. Jóvenes llenos de derechos, y ninguna obligación, jóvenes protegidos hasta la saciedad, por unos padres y madres que han querido, protegerse emocionalmente, ante los fracasos de sus hijos e hijas. ¿Quizás sean hijos/as Mal-Educados, porque tuvieron padres/madres Mal-Educados para su función?
Actualmente estamos inmersos en muchos programas de reeducación de menores, y reeducación, porque no decirlo, de padres y madres. Hermano Mayor o SuperNanny, son dos ejemplos claros, pero existen otros reality que están explotando estas situaciones a las que la sociedad ha llegado.
Son muchas las familias que llegan a nuestro Gabinete Especializado buscando una ayuda a educar o reeducar a sus hijos/as, y que no admiten que el entorno donde sus hijos/as llegaron a educarse, fue uno de los responsables directos de esta situación que ahora viven, y me llegan como siempre las palabras, aunque estoy totalmente en contra, de un Psicólogo que en una charla-ponencia nos decía un ejemplo claro. “Una madre que llega al psicólogo a buscar ayuda porque su hijo de alrededor de 15 años le pega. Irónicamente el Psicólogo le dice que la responsabilidad es suya, y que ahora debe aguantar, ya que de pequeño no le dejó sufrir lo suficiente”. Estoy en contra de buscar en una madre solo, toda la responsabilidad de la sociedad.
Matizo más, creo que desde la sociedad se ha dejado un poco de lado la educación de nuestros hijos e hijas, y hemos trabajado más nuestro propio ego y nuestras envidias, en una época donde el dinero no era un problema, y si el poder aparentar más que el otro, y en un momento donde todos los hijos e hijas tenían caprichos no luchados, y para tener un buen móvil, no debían más que compararse con otros, en vez de luchar por conseguirle.
Entre todos se ha colmado una sociedad joven llena de derechos, y sin ninguna responsabilidad sobre sus actos, y esto, a su vez ha tenido un efecto multiplicador dentro de la propia microsociedad de los jóvenes, muchas veces ayudado por la época de las redes sociales informatizadas. Con lo que vemos y nos encontramos a personas o jóvenes con 16-18 años, con la madurez emocional de un niño de 3-5 años.
Y dejando de lado la sociedad, y trabajando más lo micro, nos acercamos a las familias, las cuales han sido capaces en muchos casos de ayudar a estas situaciones, por motivos diversos, pero con un objetivo común, “dar a nuestros hijos/as lo que nosotros no tuvimos”, donde llegamos a la conclusión que les estaban dando una Mal-Educación.
Aunque el panorama parezca difícil, todo es re-educable, o todo es educable, no se cual es el termino mejor traído, o quizás mejor utilizado. Pero las conductas desadaptadas, producidas por nuestra mal acción, (no con esto digo o afirmo que es de forma intencionada), pueden llegar a modificarse, aunque ahora puede que cuesten algún esfuerzo más, que cuando eran menores.
Alguna vez he escrito la necesidad que tienen los menores de que sus padres y madres les marquen los limites, le marquen las reglas, pues en un futuro, al hacerse adultos les serán más fácil poder comprender un mundo que esta estructuralmente reglado. Y aprenderán la frustración como algo tan necesario e importante, como la propia satisfacción de conseguir las cosas por y con su esfuerzo, tan necesario como aprender a llorar y a reír, aprender a ganar y aprender a perder, etc., etc., cosa que le hemos privado por qué no sufran, o “por no sufrir nosotros”.
Ahora estos padres y madres, con estas problemáticas deben empezar a marcar limites muy fuertes, y a veces, muy encontrados a sus hijos e hijas, muchas veces mayores, con muchos problemas, y algunos con altos consumos de drogas (porros o alcohol), y ahora es más difícil contener una “rabieta” que cuando tenían dos o tres años, ahora son mas incontrolables, ahora cuesta más, pero no es imposible.
Para terminar un último ejemplo de la educación de padres y madres, de la generación que nos ayudo a crecer, y a la que estamos ayudando a nosotros. Pues no hay que olvidar que la educación es ayudarles a crecer, para la reproducción social de la sociedad. A veces me llegan padres y madres, y me dicen que saben que está mal que un niño de 12 años tenga acceso a un móvil de última generación y con acceso a datos, pero es que es el único niño/a de su clase que no lo tenía. Frases muy lapidarias para tirar por tierra una buena educación a un menor.
Y para terminar como siempre mi artículo, solo recordar que hemos pasado de una sociedad que se preocupaba que pensaran mas de nuestros padres y madres, porque no nos daban educación y éramos educados, a una sociedad que nos preocupa que piensen que somos pobres o malos padres/madres, porque no le damos a nuestros hijos/as lo que nos piden.
Ahora bien, no toda la sociedad juvenil tendrían cabida en Hermano Mayor, hay muchos jóvenes, la gran mayoría, que son grandes educados.
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