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Los restos del joven de 28 años de Cazalegas reciben sepultura en el cementerio

Víctor González Flores, como se llamaba la víctima, fue encontrado sin vida en una finca de la localidad con varias heridas, algunas de ellas con arma de fuego. Todas las hipótesis están abiertas

Redacción La Voz del Tajo | Miércoles 23 de abril de 2014

La Iglesia San Vicente Mártir se convirtió este domingo en un auténtico hervidero de personas que quisieron despedir a Víctor González Flores en el funeral oficiado antes de proceder a la inhumación de sus restos mortales. El cuerpo del joven de 28 años fue localizado sin vida en una finca conocida como Maris, en la vecina localidad de Cazalegas, pasadas las 12.15 del mediodía. Gente que se encontraba en terrenos aledaños aseguraron haber escuchado hasta cuatro detonaciones, antes de hallar el cadáver. Los servicios de emergencia confirmaron que el finado tenía varias heridas en la cabeza y la cara, así como otras más en el abdomen, algunas de ellas por arma de fuego. El suceso tuvo lugar a menos de 500 metros de la Autovía A-5.

Hasta el lugar de los hechos se desplazaron agentes de la Guardia Civil, una UVI y una ambulancia de soporte vital básico, aunque los sanitarios solo pudieron certificar, a su llegada, la muerte del joven. El levantamiento del cadáver se produjo a las 13.30 horas. El titular de los juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Talavera decretó el secreto sumario del caso.

Víctor era de una familia muy querida y apreciada en la localidad, era el mediano de tres hermanos, regentaba el negocio familiar -dedicado a la construcción, y vivía con su novia. Todas las hipótesis están abiertas en relación a este presunto homicidio, donde destaca por encima de todo la desaparición del todoterreno del fallecido -de color negro y de la marca Kia, en el que este se desplazó con un remolque y varios galgos.

Consternación en este municipio de unos 2.000 habitantes, donde se le recuerda como una persona que llevaba bien con todo el mundo. El Consistorio local, en señal de condolencia con los familiares y como manifestación de duelo, declaró tres días de luto oficial; las banderas ondearon a media asta y se suspendió cualquier actividad festiva que pudiera estar programada durante el fin de semana. En el mismo comunicado, el alcalde, Amando Blanco, mostró su “enérgica repulsa” y condenó los hechos acaecidos, así como pidió que los incriminados padezcan las consecuencias de la justicia penal. En el Campeonato de Galgos en Campo de Sevilla, el pasado sábado, se guardó un minuto de silencio en su memoria.