En el análisis de 644 vías se extraen curiosidades como que el Paseo de los Arqueros se llamó de Los Hongos, la Calle Carnicerías era la del Cuerno o Gaspar Duque la de los Tramposos
Javier Fernández | Miércoles 23 de abril de 2014
El colectivo histórico Arrabal presentó la semana pasada su 'Callejero Histórico de Talavera de la Reina', una publicación que analiza el nombre de las calles de la ciudad desde el siglo XIII hasta la actualidad. Diferentes gobiernos, y sus respectivas ideologías políticas, marcan el devenir de una evolución histórica que se ve reflejada en la nominación de las calles de Talavera, especialmente las más céntricas y significativas. Uno de los autores del libro, César Pacheco, indicó que este minucioso trabajo les ha llevado más de ocho años de investigación. Éste manifestó que los cambios más llamativos tuvieron lugar a partir del siglo XIX, sobre todo marcados por los “tintes políticos” del Gobierno de turno.
Una huella del régimen se evidenció en los años 50 con nombres de fieles al franquismo; véase las calles General Yagüe, General Mola, Muñoz Grande, José Antonio o Plaza del Generalísimo. Nada más instaurarse la época franquista se fueron eliminando todos los vestigios ideológicos de la República en el nombre de las calles talaveranas. En otro orden, el crecimiento de Talavera y el surgimiento de nuevos barrios o zonas han recibido nombres más temáticos; por ejemplo, en el barrio de La Solana sus calles tienen nombres de países latinoamericanos, en el Sur-10 figuran muchas capitales de países europeos y en El Parque nombres de grandes pintores de la historia como Miguel Ángel, Murillo, Velázquez, Goya, Picasso o Zuloaga.
La Plaza del Pan y la del Reloj han sido las vías que más denominaciones han tenido. Con motivo de la promulgación de la Pepa en 1812, la Plaza del Pan pasó a ser de la Constitución, aunque con la llegada del absolutismo de Fernando VII en 1814 se regresó al antiguo nombre. También existen errores de bulto en la historia de las placas de las calles, como la dedicada al Doctor Talavera, en la que realmente figura el nombre de su hijo Rodrigo Arias Maldonado o la calle llamada Blanca de Aragón, que se ha evolucionado aunque orginalmente se dedicó a dos talaveranos ilustres Blanco y Aragón.
También hay nombres muy curiosos que han tenido calles muy conocidas; así el Paseo de los Arqueros se llamó de Los Hongos, la calle Carnicerías se denominó durante años del Cuerno o Gaspar Duque era la vía de Los Tramposos. La estética de las placas de las calles también ha ido evolucionando a lo largo de los años, por eso, Arrabal presentará una propuesta al Consistorio para que se rescaten de los edificios que puedan ser derribados o rehabilitados y se expongan en e Museo Ruiz Luna como parte de nuestro patrimonio. En la presentación del libro, también estuvieron presentes el director del colectivo, Miguel Ángel Blanco, o Yolanda Moreno, otra miembro del grupo.
Tras la presentación a los medios, la publicación se expuso en sociedad en la planta ático de El Corte Inglés, donde se contó con la actuación del guitarrista Omar Felipe y el saxofonista Daniel Juárez. El libro, que puede ser un perfecto regalo de Reyes, puede encontrarse en El Corte Inglés y en diferentes librerías de la ciudad al precio de 20 euros.
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