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Caja Rural Castilla-La Mancha sigue creciendo con una nueva agencia financiera en Segurilla (Toledo)

Es la número 70 abierta por la entidad financiera en los últimos dos años dentro de su Plan de Expansión por la comunidad autónoma

Irene González Moreno | Miércoles 23 de abril de 2014
Caja Rural Castilla-La Mancha ha abierto al público una nueva agencia financiera en la localidad toledana de Segurilla, la número 70 de un total de 92 agencias y 16 oficinas puestas en marcha por la entidad financiera en los últimos dos años dentro de su Plan de Expansión por la comunidad autónoma.

La nueva agencia está dirigida por Pedro Luis Pérez García y plasma el compromiso de Caja Rural Castilla-La Mancha de cubrir al máximo el territorio donde está implantada, generando empleo autónomo, riqueza y un nuevo servicio financiero competitivo, moderno y comprometido con la tierra y el desarrollo económico y social de sus habitantes.

Las agencias financieras funcionan exactamente igual que una oficina de Caja Rural Castilla-La Mancha, ofreciendo los mismos productos y servicios, con la única diferencia de que tienen al frente a personal autónomo, dentro un modelo de costes eficiente y rápido en expansión cuyos buenos resultados están superando todas las previsiones.

Según el director general de Caja Rural Castilla-La Mancha, Víctor Manuel Martín López, “las agencias financieras son una oportunidad de generar riqueza en nuestros pueblos”, ya que están dirigidas por habitantes de las propias localidades, que son quienes mejor conocen a sus vecinos y saben cómo atender sus necesidades.

En muchos casos, estos agentes eran gente parada, joven y preparada que no tenía opciones de trabajo y en cuyos pueblos no había Caja Rural Castilla-La Mancha.

Oportunidad de negocio

Instalando esta franquicia financiera, estos profesionales “han sido valientes y entre las dos partes hemos iniciado una oportunidad de negocio para que puedan sacar un rendimiento y dar de comer a sus familias con total dignidad y normalidad”, afirma Martín López.

El objetivo de estos establecimientos es captar los excedentes de liquidez de los ahorradores de la región y canalizarlos a los sectores productivos para generar economía, nuevas empresas y empleo.

Además de las 92 agencias financieras puestas en marcha por la entidad desde 2011, Caja Rural Castilla-La Mancha cuenta con 16 nuevas oficinas en Albacete, Cuenca, Ciudad Real, Villarrobledo, Tarancón, Huete, Alcázar de San Juan, Bolaños de Calatrava, Almansa, Hellín, Valdepeñas, Campo de Criptana, Tomelloso, Almagro, Pedro Muñoz y La Roda.

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