OPINIÓN

Tarjeta de colores

Moisés de las Heras

Irene González Moreno | Miércoles 23 de abril de 2014
Asisto con retraso a la polémica suscitada por una tarjeta buzoneada. Analizándola, no me llama la atención sólo su color, también muchos otros detalles que hacen entenderla por completo.

En principio, dilucidando si era azul Talavera, azul PP o vergüenza zapateril, parece azul Talavera, pero no inocente. Se trataba de dar a una propaganda electoral –inconfesable, aunque lo era- una solemnidad, prestancia y neutralidad municipal. De hecho, muchos receptores lo confundieron con un Saluda del Alcalde. Su diseño y fraseología era consistorial, no de partido: hablaba de “implicación”, de “compromiso” ciudadano con Talavera y lucía un “tú” directo que apelaba a un activismo personal, lanzado directamente a la responsabilidad individual, encerrona sentimental para que al llegar a “tú comprensión” (con los errores) hiciera desistir de la agresividad crítica, porque la responsabilidad también “es tuya”. Muy hábil. Es decir, unir Talavera, institución, ciudadano y PSOE en un todo y sugerir una crítica constructiva, como signo de civilidad, lo cual devenga tres beneficios: induce a ser positivos, suaviza la crítica y minimiza y quita hierro a los errores, lo cual es lícito cuando se defiende gestión propia; (no así cuando se está en la oposición, entonces sí se sacan colores revolucionarios). En este sentido, dicho azul Talavera también es azul PP, dado que el mensaje “va para todos”, para el rojo y el azul… azul talaverano, claro. Rivas, el de aquí, aportaba hace dos semanas la idea del naranja del PP, que también intentaba captar voto de izquierdas diluyendo colores. En definitiva, doble mensaje siempre, para poder excusar la otra intención. Está claro, por tanto, que no había que fijarse sólo en el color, sino en todo. El PSOE ES “Talavera”, ES el Ayuntamiento, SON SUS Fiestas, (se buzoneó en fiestas) y el emisor, ¿quién era?, ¿el ayuntamiento, el PSOE, el alcalde Rivas o el candidato Rivas? Ninguno. En el sobre ponía “Talavera de la Reina”. Era “Talavera” quien “hablaba”. Aquello fueron más que colores.

Noticias relacionadas