Irene González Moreno | Miércoles 23 de abril de 2014
Hace más de un mes que se perdió la pista de Antonio Fernández Muñoz, cuyo rastro se perdió el pasado 30 de septiembre, y de momento cesa la búsqueda en el embalse de Azután por parte del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil, según informó el subdelegado del Gobierno en Toledo, José Julián Gregorio. El motivo es la crecida del río tras las últimas lluvias que hacen que las condiciones no sean las más idóneas para los trabajos. Gregorio dijo que se retomará el rastreo en las dos estaciones de la Vía Verde, Las Pilas y La Nava, siendo éstos los últimos puntos en los que se tiene constancia de la presencia de este hombre que iba a iniciar una jornada de caza en la zona. De hecho, allí fue donde lo ubicaron las dos personas que lo acompañaron hasta el término municipal de Aldeanueva de Barbarroya.
Aunque el subdelegado definió este caso como “extraño”, lanzó un mensaje de tranquilidad a la familia y aseguró que hay que seguir confiando en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, ya que están trabajando haciendo “lo posible y lo imposible”. Todas las líneas de investigación siguen abiertas y no se cierra ninguna hipótesis, aunque Gregorio no quiso avanzar ningún indicio para “evitar especulaciones”. De la misma forma, tampoco aclaró si los testimonios de los testigos que le vieron por última vez han servido como pruebas certeras en la investigación. De momento, seguirán peinando esta zona de campo, entre Aldeanueva y Belvís de la Jara, con perros especializados.
La familia del desaparecido sigue su búsqueda de forma paralela tanto a pie como a través de las redes sociales en busca de cualquier dato que pueda serles de ayuda.
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