DEPORTES

Un estatua para 'Tostaíto' Millán en Pepino

LA MANO NEGRA

Futbol 7 + de 32 años

Redacción La Voz del Tajo | Miércoles 23 de abril de 2014
Esta semana hablamos de uno de los habitantes con más glamour de Pepino, Pedro "Tostaito" Millán, cuya participación en la San Silvestre no pasará a los anales de la posteridad por culpa de que se le acabó el dentífrico ese día y no pudo quitarse el sarro de los dientes y ya se sabe que con sarro las posibilidades de obtener una buena clasificación en cualquier modalidad deportiva disminuyen bastante. Este chico es bastante conocido por su labor en el mundo del arbitraje, destacando sus tiempos como cuarto árbitro en la tercera división de fútbol, siendo el encargado del manejo del cartel electrónico amen de estar en contacto por medio de un auricular con el árbitro principal para comentarle posibles incidencias, viviendo su momento álgido con ocasión de un Azuqueca-Almansa en que cuando se estaba a punto de llegar al descanso, Millán levantó hasta 6 veces seguidas en un corto espacio de tiempo el cartel electrónico reflejando los números 26,1,9,3,13 y 47, surgiendo entre los allí presentes diversas conjeturas y elucubraciones sobre este hecho tan curioso. Así sobre el número 26 se pensaba que iba a salir ajugar un chico de la cantera, sobre el 1 que era el minuto de añadido, respecto al 9 que como que quitaba al delantero centro si el Azuqueca perdía 0-2 y necesitaba remontar, sobre el 3 se decía que eran muchos minutos de añadido y que tampoco se había perdido tanto tiempo, sobre el 13 que como iba a salir el portero suplente si al titular se le veía más fresco que las manzanas que robaba en los huertos cuando no tenía ni donde caerme muerto y ya el mosqueo fue generalizado cuando apareció el 47, momento en que el árbitro principal se fue al lugar de Millán y comprobó que había interferencias en su auricular y que se le había metido la señal de Radio Nacional de España, oyendo el árbitro lo siguiente: "El número complementario es el 33 y con ello terminamos el sorteo de hoy de la Bonoloto". "Tostaito" se dirigió a la sala de altavoces del campo de fútbol para explicar el error y le cogió tanto gusto al micrófono que explicó a la concurrencia como se cocina el pulpo a la gallega, cantó la canción "El cochecito leeré", narró la emoción de aquel 25 de Mayo de 1980 en que tomó la primera comunión con su traje de marinerito y cuando se disponía a recitar una poesía destinada a los recogedores de espárragos con teléfono móvil de la compañía Movistar, llegó un aficionado del Azuqueca que rondaba los 100 kilos portando un garrote y le dijo: "Termina ipso facto porque sino te va a caer una somanta palos que te dejo molidos tus huesos, si no terminas de una p. vez de decir tonterías, no te libras ni aunque te eches Colonia Nenuco. Mi mujer me ha preparado una paella de mariscos sin mejillones y tengo tanta hambre que tienes suerte que al no ser gitano no me coma tu brazo, con lo que ya sabes, que comience la segunda parte y cada uno a su casa". Su última actuación arbitral terminó como el Rosario de la Aurora. En concreto fue el año pasado cuando en sus vacaciones en Algeciras le pidieron el favor de que arbitrase un partido entre un grupo de gitanos contra un grupo de moros, sucediendo que en el último minuto y con empate en el marcador, hubo un posible penalti en el área de los gitanos al caer derribado un moro, observando malas caras Millán tanto entre los aficionados de un equipo como del otro, teniendo la idea de fingir un desmayo con lo que tuvo que entrar una ambulancia para llevarle al hospital, siendo acompañado por un directivo de cada equipo. El directivo gitano era muy mal pensado y como dudaba del desmayo y pensaba que nuestro amigo estaba fingiendo, cogió la hoja de la sección de cultura del "Diario de Algeciras" y le hizo cosquillas en la planta del pie izquierdo, no pudiendo contener la risa y al notar que fue descubierto se apeó de la ambulancia en plena marcha, teniendo suerte que fue a la altura del Puerto de Algeciras, lanzándose al agua con el objetivo de cruzar el Estrecho de Gibraltar y pedir asilo político para que de este modo el Ayuntamiento de Pepino gestionase su repatriación. Significar que Pedro Millán batió el record histórico de habitantes de Pepino en cruzar el Estrecho a nado, decidiéndose en el pueblo en ponerle una estatua para conmemorar esta hazaña tan pronto termine la crisis y haya fondos monetarios para ello. De momento se le ha regalado un cheque regalo para una sesión gratuita de foto depilación. Para terminar, comentar que el protagonista de hoy anda algo cariacontecido porque esperaba un recibimiento multitudinario en Pepino, pero el día que llegó sobre las 8 y media de la mañana, se encontró con que solo estaba yo esperándolo, dándome un sentido abrazo y con lágrimas en los ojos me dijo que era de las personas que merecía la pena y que admiraba mi categoría humana. Lo que no sabe él es que yo había estado trabajando de noche en la Resi de Torrijos y tras salir de comprar el pan al cruzar la calle le vi y le seguí la corriente. Espero que no se entere nunca por la tremenda decepción que se llevaría, pero aunque se enterase, con la alegría de su nuevo Bebé seguro que se le pasaría rápido. Enhorabuena "Tostaito".



Noticias relacionadas