La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha comenzado la retirada del dique de contención construido el pasado 20 de marzo en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo.
Esta barrera, de aproximadamente 300 metros de longitud, se levantó como medida preventiva ante el riesgo de crecida del río Tajo, con el objetivo de evitar que el agua alcanzara las instalaciones del centro sanitario.
Durante estos días, entre 60 y 80 efectivos de la UME, desplegados desde su base en Torrejón de Ardoz (Madrid), han permanecido en la zona, asegurando el perímetro y monitoreando el nivel del río.
Tras la estabilización de la situación y la disminución del riesgo de inundación, el operativo ha dado inicio al desmontaje del dique, devolviendo la normalidad al entorno del hospital.
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