El Bono de Alquiler Joven puesto en marcha por el Gobierno de Castilla-La Mancha ha recibido ya más de 900 solicitudes a menos de una semana de su puesta en marcha. Así lo ha asegurado el consejero de Fomento, Nacho Hernando que se ha reunido junto con la directora general de Vivienda, Inés Sandoval y la directora general de Planificación Territorial y Urbanismo, Silvia López, con la Federación de Empresas de la Construcción de Castilla-La Mancha, FERECO, con su presidente al frente, Manuel Carmona.
En este contexto, Nacho Hernando ha avanzado que “vamos a poder alcanzar en torno a unas 1.500 solicitudes del Bono Joven del Alquiler en total; por lo tanto, las 900 que ya hemos recibido, son más de la mitad” y ha asegurado que “a principios de la semana que viene, como muy tarde, puede ser que tengamos agotado ya el crédito que se nos ha asignado por parte del Ministerio”.
En este sentido, ha destacado que “esto lo que denota es un éxito por parte de la de la convocatoria del Ministerio y un éxito en la tramitación del Gobierno de Castilla-La Mancha, en la medida en la que en tan solo 10 días desde que recibimos la notificación oficial por parte del Ministerio, pudimos tener ya el plazo de solicitudes abierto, siendo la única comunidad autónoma en España que ha podido lograr este éxito”.
Asimismo, el responsable de Fomento ha resaltado que con FERECO “es con quienes tenemos pactada nuestra hoja de ruta para poder conseguir el objetivo que se tiene que marcar todas las instituciones en este país, de tomar medidas que nos lleven a aportar soluciones a la dificultad que encontramos en el mercado de la vivienda hoy en día”. “Soluciones que, sobre todo, pasan por una mayor oferta de vivienda en un país que en los últimos 15 años no ha construido apenas viviendas para toda la creciente demanda”, ha precisado.
Asimismo, Hernando ha puesto en valor el decálogo de medidas que se ha planteado en la Conferencia de Presidentes, y del que FERECO ha sido coautor y, y que se ha producido “fruto de esa colaboración que mantenemos con el sector a la hora de diagnosticar con de manera científica, rigurosa, sin ningún tipo de telarañas ideológicas, simplemente desde un planteamiento razonable y pragmático para diagnosticar cuáles son los problemas y, por lo tanto, ofrecer soluciones al respecto, de una manera absolutamente civilizada y sin criminalizar a nadie”.
En total son diez medidas que giran en torno al aumento de la disponibilidad del suelo; la agilización de licencias; el aumento y la cualificación de mano de obra; la mejora de financiación; la puesta en marcha de un nuevo Plan de Vivienda; el fomento de la colaboración público-privada; la seguridad jurídica; el acuerdo para llevar a término un Pacto de Estado en torno a la Vivienda; y el establecimiento de un Plan Nacional de Seguros.
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