El Proyecto de Ley de Presupuestos de Castilla-La Mancha para el año 2025, que pasará el próximo martes por el Consejo de Gobierno, contempla más de 2.036 millones de euros para la Memoria de Impacto Demográfico donde se aúnan las partidas que se destinan a la lucha contra la despoblación.
Así lo ha avanzado el vicepresidente primero del Ejecutivo autonómico, José Luis Martínez Guijarro, que ha participado en la VIII Feria Nacional para la repoblación de la España Rural (PRESURA), que se celebra a lo largo del fin de semana en el Palacio de Cristal de la Arganzuela, en Madrid, donde ha subrayado que, con este nuevo presupuesto, “se demuestra el compromiso firme del Gobierno regional con el desarrollo integral del medio rural en la región y la garantía de acceso a los servicios públicos de toda la población con independencia del lugar de residencia”.
Ahondando en las cifras, Martínez Guijarro ha detallado el presupuesto de las políticas activas frente a la despoblación para el próximo año se han incrementado un 6 por ciento respecto a lo presupuestado en 2024, destinándose casi 115 millones de euros más, y representa casi el 25 por ciento del techo de gasto para el próximo ejercicio, o lo que es lo mismo, “uno de cada cuatro euros del presupuesto efectivo de la región se destina a la lucha contra la despoblación”, ha sentenciado.
Durante su intervención, ha destacado el hecho de que las próximas cuentas de la Comunidad Autónoma destinen el 3,7 por ciento del PIB de Castilla-La Mancha, “casi el doble” de lo que piden los colectivos de la España Vaciada, que hace pocas semanas exigían en un manifiesto que se destine el 2 por ciento del PIB a estas zonas.
SANIDAD, SERVICIOS SOCIALES, IGUALDAD...
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, también ha avanzado la aprobación, este próximo martes, de los presupuestos autonómicos para el año 2025, en los que “va a seguir creciendo el gasto en sanidad, en servicios sociales, en igualdad o en la lucha en despoblamiento”, partida esta última que ya supera la barrera de los “2.000 millones de euros” para “cohesionar el territorio, compensando en las zonas rurales lo que, de por sí, ya tienen en otras”, ha rematado.
El jefe del Ejecutivo ha incidido en la importancia de aprobar las cuentas públicas castellanomanchegas en tiempo y forma, algo que “no tendría que ser noticia” pero que “realmente en España es noticia, porque no es habitual que se aprueben los presupuestos, y menos en su momento”.
“En esta región estamos parando la hemorragia de migración del campo hacia las ciudades”, ha proseguido, antes de valorar la inversión castellanomanchega contra la despoblación y “contra el fenómeno de la desigualdad, también territorial”. En este sentido, ha valorado el rendimiento de las medidas adoptadas en la Comunidad Autónoma y ha destacado que “en las zonas que están afectadas por la legislación que privilegia, de alguna manera, vivir en el mundo rural, estamos consiguiendo, lentamente, invertir” la situación.
En materia de reto demográfico, García-Page ha elogiado “la dialéctica del mundo rural que se rebela, que toma conciencia de que, no solo no está por debajo del mundo urbano, sino que además no es residual”, ha manifestado. En este punto, ha ejemplificado la situación de la Comarca de la Jara, en la que “hay más de 500 o 600 personas empadronadas” desde la entrad en vigor de dicha ley pionera. “Son de esas batallas en las que hay que mantenerse, en las que hay que ser tenaces, también con un punto de ingenio y osadía” y “mucho tesón”, ha resumido.