La presidenta de la Diputación de Toledo, Concepción Cedillo, ha presidido este mediodía el minuto de silencio convocado en la entrada del Palacio provincial para condenar el asesinato de dos menores este fin de semana en los municipios de Otero y Mocejón.
Los empleados públicos de la institución, los ciudadanos y todos los que han querido sumarse a esta demostración de repulsa por esos actos despreciables, han guardado un minuto de silencio por las víctimas, solidarizándose con sus familiares y amigos, demostrando con su presencia la reprobación más absoluta por estos casos de violencia, que atentan contra la convivencia y el respeto por la vida humana.
La presidenta, acompañada por miembros de su equipo de Gobierno y representantes de otros grupos políticos representados en la institución, se han sumado así a un acto sentido, sencillo y emotivo, visibilizando la necesidad de que estos sucesos no vuelvan a repetirse y que la cordura y el sentido común prevalezcan, para que no tengamos que volver a sufrir la muerte injusta de inocentes.
Antes del minuto de silencio, la presidenta de la Diputación ha realizado una declaración para confesar que “estamos consternados por los asesinatos de dos menores inocentes; una joven de 17 años en Otero, el sábado pasado; y un niño de 11 años, en Mocejón, asesinado mientras jugaba al fútbol con sus amigos”.
Ha añadido que “quiero transmitirles mi condena más absoluta, en mi nombre y en el de la Diputación de Toledo, y reiterarles nuestra confianza absoluta en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, y en especial la Guardia Civil, que están realizando un esfuerzo titánico para capturar y poner a disposición de la justicia al asesino de Mateo, sobre el que deberá caer todo el peso de la ley”.
“Afortunadamente –ha añadido-, ya se ha producido la detención del presunto asesino de Otero, que mató a la hija de su pareja, que afortunadamente se recupera en el hospital. Hago un llamamiento a la ciudadanía para que, de una vez por todas, acabemos con estas noticias y que seamos capaces de vivir en paz y que estos asesinatos sean los últimos que tengamos que lamentar”.
La concentración en la Diputación de Toledo ha culminado así un fin de semana trágico vivido en la provincia de Toledo, con el asesinato el sábado de una joven de 17 años en Otero a manos de la pareja de su madre, que también fue agredida y permanece ingresada grave en el hospital, en lo que parece ser un acto de violencia machista y violencia vicaria.
El domingo por la mañana se conocía el apuñalamiento que acabó con la vida de un niño de 11años en el campo de fútbol de Mocejón, localidad de la que también es alcaldesa la presidenta de la Diputación, que ayer pedía respeto para las investigaciones que llevan a cabo los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, con la esperanza de que se pueda localizar al autor de los hechos, desechando conjeturas y especulaciones, y que el peso de la justicia caiga sobre quien ha sido capaz de cometer un acto tan abominable.
El minuto de silencio ha acabado con un sonoro aplauso en memoria de las víctimas, con el deseo unánime de que no sean necesarias más concentraciones para condenar asesinatos execrables e innecesarios.