La recta final de febrero ha estado marcada por un ambiente típico de estas fechas, con frío, viento fuerte, chubascos y nevadas en cotas no muy altas. La llegada de marzo marca el inicio de la primavera climatológica con gran expectación debido a las festividades que se celebrarán estas semanas como la Semana Santa o las Fallas de Valencia. Samuel Biener, experto de Meteored (tiempo.com), adelanta la previsión para este primer mes primaveral.
Las series climatológicas indican que en marzo las temperaturas tienden a marcar valores medios de 2 a 4 ºC más altos respecto a los de febrero en el interior peninsular, siendo más moderado el ascenso en las costas y en las islas. Por esto, las anomalías que analizaremos a continuación se deben entender desde ese ambiente ya más templado.
Por otro lado, llamamos “normales” a las precipitaciones que superan los 150 l/m² en el norte de Navarra y en el oeste de Galicia. Frente a estas cifras generosas, otras regiones apenas oscilan entre los 10 y 20 l/m², caso del valle del Ebro, sur de Valladolid, sureste de Zamora, cabo de Gata, Lanzarote y Fuerteventura.
Aunque marzo no suele ser de los meses más lluviosos en España, los chaparrones suelen ser recurrentes y todavía se pueden producir grandes nevadas asociadas a irrupciones de aire polar o ártico.
Según el modelo de Meteored, en los primeros días de marzo se esperan temperaturas cercanas a la media en gran parte de España, excepto en algunos puntos del mediterráneo, Cantábrico oriental, Baleares y Canarias, donde se podrían situar entre 1 y 2 ºC por encima del promedio.
Durante la segunda semana, en el norte y este peninsular, Baleares y Canarias los valores térmicos probablemente estarán entre 1 y 3 ºC por encima de los registros “normales”. A finales del mes, coincidiendo con Semana Santa, parece que seguirán por encima del promedio, pero con cierta tendencia a la normalización por el oeste. Por tanto, todo apunta a que esta temporada invernal acabará sin registrar ni siquiera una ola de frío.
En cuanto a las precipitaciones, los primeros días se podrían situar por encima de los valores habituales en zonas de la vertiente cantábrica, sistemas montañosos y Baleares. Después, la presencia de un chorro polar ondulado podría presentar cambios drásticos en el tiempo. La formación de un anticiclón de bloqueo en Escandinavia podría traer borrascas y descuelgues de aire frío al oeste peninsular.
Se espera que predominen las situaciones atlánticas, por ello, las precipitaciones todo apunta a que estarán por encima de la media en gran parte del interior, la vertiente atlántica y en Canarias. Con esta situación, en principio parecen poco probables las nevadas abundantes en cotas bajas, pero con los vaivenes que se ven en el ‘jet stream’ tampoco nos atrevemos a descartarlas.