El Hospital General de Villarrobledo (Albacete), dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), se ha convertido en un centro de referencia para la detección de intolerancias digestivas. Durante el año pasado, este centro ha experimentado un ascenso significativo en la realización de test de aire espirado para diagnosticar intolerancias alimentarias (lactosa y fructosa) y sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado (SIBO, por sus siglas en inglés), alcanzando las 450 pruebas realizadas en ese periodo de tiempo.
"Este incremento se atribuye a un mayor conocimiento sobre la microbiota intestinal y en la importancia que tiene para la salud de los pacientes y su calidad de vida la detección de intolerancias digestivas", ha explicado el supervisor de Enfermería de la Gerencia de Villarrobledo, Carlos Catalán.
"No es una prueba que diagnostique trastornos vitales, pero que ayuda a solucionar de manera inmediata el trastorno y mejorar así considerablemente la calidad de vida de pacientes que se quejan de tener la barriga muy hinchada cuando comen y de otros síntomas como flatulencias, malestar abdominal, diarrea o estreñimiento", ha precisado Catalán.
Según ha informado el Gobierno regional, además de abarcar el área sanitaria de Villarrobledo, el Hospital General de esta localidad albaceteña se ha convertido también en centro de referencia en la realización de estas pruebas para el área de Manzanares, fortaleciendo su papel como líder en atención médica especializada.
El Servicio de Enfermería de Endoscopias, liderado por Pilar López y Lucía Acosta, desempeña un papel crucial en la realización de estas pruebas. Este equipo, altamente capacitado, lleva a cabo los test de aire espirado, que consiste en la recopilación de ocho muestras de aliento en intervalos específicos durante aproximadamente cuatro horas.
LAS PRUEBAS. En la actualidad, en el Hospital General de Villarrobledo se realizan tres tipos de pruebas: intolerancia a la fructosa, intolerancia a la lactosa y el Test SIBO (sobrecrecimiento bacteriano). Este último se ha incorporado recientemente debido a la creciente demanda por parte de alergólogos y especialistas digestivos.
Para la realización de estas pruebas se precisa de la ingestión de una solución líquida rica en azúcares fermentables y unas recomendaciones previas a la prueba. Posteriormente, se obtendrá una medición de gases exhalados que dan al facultativo la información necesaria para su diagnóstico.