El Consejo de Ministros ha aprobado, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), el Séptimo Plan General de Residuos Radiactivos (PGRR), con el que descarta definitivamente la construcción del Almacén Temporal Centralizado (ATC), establece un calendario de cierre de centrales nucleares entre 2027 y 2035 y contempla un coste de 20.200 millones que sufragarán los titulares de las instalaciones atómicas.
Junto con el plan, el Ejecutivo ha aprobado dejar sin efecto la designación de Villar de Cañas (Cuenca) para albergar el ATC, según ha informado el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO).
El VII PGRR establece la política del Gobierno en materia de gestión de los residuos radiactivos, incluido el combustible nuclear gastado, y del desmantelamiento y la clausura de las instalaciones nucleares.
El presidente regional, Emiliano García-Page ha asegurado: "Hace 12 años Cospedal promovió la instalación de un cementerio nuclear en Castilla-La Mancha. Una decisión personal y partidista contra criterios técnicos y el sentir ciudadano. Hoy, por fin, el Gobierno actual entierra el ATC. Es un día de celebración para todos los que defendimos pararlo".
Por su parte, el alcalde de Villar de Cañas, Alejandro Pernías, ha lamentado la decisión "sin respaldo técnico ni científico" que ha tomado el Gobierno de España para dar carpetazo definitivo y tumbar la posibilidad de que la localidad albergue un Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares, asegurando en todo caso que ya valora recurrir al Tribunal Supremo. "Si esto no lo arregla la política, lo tendrán que arreglar los tribunales".
En declaraciones a Europa Press, ha apuntado que hoy "no es un día bueno", pero no da "por perdido" el proyecto.
Ha recordado en este punto que el Tribunal Supremo "siempre le ha dado la razón a Villar de Cañas cuando se ha cuestionado el emplazamiento".
"Con este disparate, nadie tiene nada que celebrar. Le quitan el ATC no sólo a nosotros, sino a toda la comarca", ha lamentado, dirigiéndose directamente al presidente regional, Emiliano García-Page, indicándole que ahora, en lugar de un cementerio nuclear, "habrá dos", en alusión a los almacenes individuales de Zorita y Trillo, que además no llevarán aparejado "ni inversión ni centro tecnológico", como sí ocurría con el proyecto de Villar de Cañas.
A esto ha sumado que "se va a subir el precio de la factura de la luz", toda vez que este disparate "cuesta 2.000 millones de euros" a las arcas del Estado.