Pues se ha cumplido el tradicional periodo de prueba para los políticos que alcanzan el poder y tras el que ya se les pueden exigir responsabilidades aunque esta gracia vaya por barrios.
En mi Talavera de la Reina, José Julián Gregorio López quiere sacar pecho pero si discriminamos paja y grano, encontramos pocos propósitos y planes de futuro y mucho de crítica a lo anterior. Vamos, lo que se conoce como una huida hacia delante.
Mientras, en Toledo Charly Velázquez se remanga, toma iniciativa y se siente alcalde de verdad a la hora de mandar en el Ayuntamiento. Hay que ver cómo cambia el cuento de un sitio a otro. Por algo un buen amigo me confesaba su sorpresa estos días tras escuchar la intervención del capitalino en los recientes galardones de FEDETO. “Hay mucha diferencia entre los dos a la hora de… hablar”, me decía.
No es de extrañar que se propaguen esas sensaciones cuando el regidor talaverano vive desde el principio de la legislatura a la sombra de su ‘mano derecha’. Ese al que ya han bautizado como el alcalde en la sombra y que comparte su cargo de primer espada in pectore en la Plaza del Pan con el puño de hierro en el grupo parlamentario de VOX en gilitos.
Además, manifiesta es la nula relación personal de Gregorio y Velázquez tras caer el primero de la presidencia del PP toledano y entrar el segundo a sustituirle. Esa rencilla, aderezada por las eternas dentelladas del Caimán de las Altas Torres, no legitima ninguna alianza entre los dos alcaldes peperos.
Entre otras cosas porque en Talavera manda VOX y en Toledo el PP. Si no, miren quién mece la cuna en la Ciudad de la Cerámica y cuál es el mínimo protagonismo de la vicealcaldesa ultraderechista de la capital regional. Para estar legitimado hay que hacer cosas, no sirve sólo con aparecer en una lista.
De los trasvases económicos de ese partido que venía a poner orden y arrojar luz y taquígrafos a la política española llamado VOX a su fundación Disenso hablaremos otro día, que igual nos tenemos que echar las manos a la cabeza o sentarnos en algún sofá a reflexionar como en la canción. Por qué, por qué, por qué…