Agentes de la Guardia Civil han desmantelado una plantación de marihuana con más de 2.000 plantas en una finca de la localidad pacense de Cabeza La Vaca, y ha detenido a sus tres responsables, todos ellos vecinos de Talavera de la Reina (Toledo) que ya han ingresado en prisión.
La investigación comenzó a mediados del mes de agosto, cuando los agentes pudieron detectar la existencia de un grupo delictivo conformado por dos hombres y una mujer vecinos de Talavera de la Reina, quienes supuestamente se estarían dedicando a cultivar plantas de marihuana en el terreno de una finca ubicada en el término municipal de Cabeza La Vaca.
En el transcurso de la investigación, los agentes averiguaron cada uno de ellos tenía una "función claramente definida" en el cultivo de la marihuana, ya que mientras uno se habría encargado de contratar el alquiler de la finca, otro aportaba los materiales, útiles y herramientas necesarias para el desarrollo de las plantas de marihuana, y el tercero se encargaba de su cuidado.
Fue en la mañana del pasado jueves, 22 de septiembre, cuando más de una decena de agentes de las unidades territoriales de la Compañía de Zafra y el Equipo Pegaso de la Comandancia de Badajoz, coordinados en todo momento con el Juzgado de Instrucción de Fregenal de la Sierra, se procedió a la entrada y registro de la propiedad, en la que hallaron la siembra de tres plantaciones con un total de 2.113 plantas de marihuana.
Además de las plantas, en la actuación se intervinieron motores de riego, generadores, mulas mecánicas, herramientas, abonos, fertilizantes y otros útiles empleados para el cultivo y desarrollo, según informa la Guardia Civil en nota de prensa.
Ante estos hechos, los tres responsables fueron detenidos, y se les instruyeron diligencias por delitos contra la salud pública, por cultivo y tráfico de droga y pertenencia a grupo delictivo.
Una vez fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción, la Autoridad Judicial decretó el ingreso en prisión de todos ellos.
Cabe destacar que esta actuación de la Guardia Civil, se enmarca dentro del Plan de respuesta policial para la lucha contra el cultivo y tráfico de cannabis desarrollada a nivel nacional por la denominada 'Operación Miller', dirigida principalmente a detectar y erradicar grupos organizados dedicados a estas actividades ilícitas.