Este año, la esperada lluvia de meteoros de las Perseidas -también denominadas 'lágrimas de San Lorenzo' por la proximidad de su máximo al 10 de agosto, día de la festividad del mártir español del mismo nombre- alcanza su punto máximo en la noche del 12 al 13 de agosto, brindando a los observadores del cielo un regalo potencialmente impresionante.
Los meteoros se ven mejor desde el hemisferio norte, y en condiciones ideales sin nubes, los observadores podrían ver hasta 50 por hora. Además, la luna no interferirá en su visionado
Los meteoritos son el resultado de pequeñas partículas que ingresan a la atmósfera de la Tierra a alta velocidad, generalmente alrededor de 60 km por segundo. Los pedazos de escombros se calientan debido a la fricción con el aire y, por lo general, se destruyen en menos de un segundo a altitudes superiores a los 80 km. El aire sobrecalentado alrededor del meteorito brilla brevemente y es visible desde el suelo como un rayo de luz conocido como "estrella fugaz".
Las Perseidas están asociadas con el cometa 109/P Swift-Tuttle, que pasó por última vez cerca de la Tierra en 1992. La lluvia de meteoros lleva el nombre del punto en el cielo donde parecen originarse, el llamado "radiante", ubicado en la constelación de Perseo.
La Luna será una delgada media luna saliendo poco antes de que comience el crepúsculo, por lo que la luz de la luna no interferirá, y hay una ventaja real de estar en un sitio de cielo oscuro lejos de las luces de los pueblos y ciudades.
No obstante, el número de meteoros observables por hora es muy variable. En un sitio bien oscuro y con el radiante alto sobre el horizonte puede superar el centenar. Sin embargo, el número de meteoros observados por hora puede variar muy rápidamente según varía la densidad de fragmentos en la estela del cometa.
Así, su alta actividad, junto con las condiciones atmosféricas favorables para la observación durante el verano boreal, hace de las Perseidas la lluvia de meteoros más popular, y la más fácilmente observable, de las que tienen lugar a lo largo del año.
La mejor hora para observar las Perseidas en general se cree que es durante las horas previas al amanecer, cuando la actividad de la lluvia de meteoros tiende a ser más intensa.