“Estos próximos cuatro años, como los anteriores, vamos a poder gozar de estabilidad institucional y certidumbre” y “nos vamos a proponer, sin ningún tipo de sectarismo, seguir creciendo”, ha remarcado esta tarde
Emiliano García-Page durante la toma de posesión de su cargo como presidente de
Castilla-La Mancha, un acto institucional con el que ha iniciado un
nuevo mandato al frente de “una región cooperadora y solidaria”, ha subrayado.
“La riqueza es importante crearla, sobre todo si es para compartirla”, ha enfatizado García-Page quien ha reiterado la necesidad de “crecer y compartir”, porque “crecer nos va a llevar a seguir fortaleciendo nuestra Sanidad, nuestra Educación, la Dependencia”, ha resumido.
En el Palacio de Fuensalida, sede de la Presidencia, y ante una amplia representación de la sociedad castellano-manchega, el presidente regional ha jurado su cargo con la determinación de ponerse a disposición de “no solo de esta tierra, sino de mi país”, ha reseñado, pues “el Estado autonómico es, más bien, la unidad acrisolada, diversificada, enriquecida”, ha concluido.
“Las autonomías no están para trocear España”, especialmente en el terreno fiscal, ha matizado, al tiempo que ha indicado que, “al contrario, estamos para amplificar las ventajas del país, su pluralidad y diversidad, pero sabiendo que la autonomía solo se puede predicar de la unidad”, ha incidido. A este respecto, ha puesto de relieve que “uno es autónomo respecto de la soberanía, que reside única y exclusivamente en el pueblo español”, palabras que ha pronunciado en una ceremonia que ha culminado, precisamente, con el himno nacional de España.
En presencia de los expresidentes castellano-manchegos José Bono y José María Barreda, Emiliano García-Page ha puesto de manifiesto que Castilla-La Mancha es una región “incluyente, somos constructivos, participamos en la política del Estado porque somos Estado, y por tanto, creo que somos cumplidores con los objetivos que nos marcó la Constitución”, ha ahondado. En este sentido, ha concluido que “representamos fielmente” un modelo en el que “las autonomías han sido aceleradores impresionantes de la Sanidad y la Educación”.
En el inicio de este tercer mandato consecutivo en la Comunidad Autónoma, ha reconocido tener claro “para qué están las autonomías y para qué no”, por lo que ha puesto de relieve la importancia de celebrar este “acto solemne”. En este punto, ha aludido a “un expresidente independentista en este país”, del que ha señalado que “va a tener muchos problemas” por no acatar la Constitución y el Estado de Derecho, ha resumido. Por todo ello, ha recalcado que “tenemos un papel que jugar” y es “impedir que pueda establecerse siempre un debate estrictamente bilateral” en España, donde “jugamos un papel de multilateralidad”, ha valorado.
Arropado también por la vicepresidenta primera del Gobierno de España y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño; y por la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno nacional, Isabel Rodríguez, el presidente García-Page ha agradecido las “toneladas de cariño” recibidas en su trayectoria política. “Importa mucho”, ha ahondado, en defensa y reconocimiento de “muchos políticos que en este país se dejan la piel, se dejan jirones”.
En compañía, además, de sus homólogos de Asturias, Adrián Barbón; y de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha reconocido que “representamos fielmente el propósito que tenía el Constituyente en el 78”, que se ha evidenciado especialmente con la crisis sanitaria, donde ha aflorado “un apoyo, una solidaridad y un compartir verdaderamente extraordinario”, ha insistido.
EN RECUERDO Y HOMENAJE DE “TODA LA GENTE QUE SE HA IDO”
Ante más de 600 asistentes, García-Page arrancaba su intervención con el recuerdo de “toda la gente que se nos ha ido a lo largo de estos últimos años”, un homenaje que “haré siempre por la simple razón de que nadie termina de irse mientras permanece en la memoria y en el recuerdo”, ha considerado. En este marco, ha ensalzado la labor realizada por “los profesionales de la Sanidad” de los que ha dicho que “han dado aquello que muchos de ellos ni sabían que podían dar, responder a lo más desconocido”.
Asimismo, ha dedicado unas emotivas palabras a su familia, ha recordado la figura de sus padres ya desaparecidos, y se ha dirigido, en definitiva “a toda esa gente que tengo cariño” y a quienes “con humildad” ha pedido “disculpas porque terminan recibiendo arañazos”, ha aseverado. Más aún, “hoy que empieza una nueva andadura en la Presidencia, pido también disculpas a toda la gente que se haya podido sentir no bien atendida a lo largo de los años de gestión”, ha indicado, mientras ha resaltado que “arreglamos muchos más problemas de los que creamos, pero muchos se pueden quedar sin arreglar o no son ni siquiera entendidos”, ha admitido.
“EL COMPROMISO DE EMILIANO”
“Habéis venido a escuchar el juramento del presidente de Castilla-La Mancha y os vais a ir escuchando el compromiso para los próximos cuatro años de Emiliano”, ha señalado al final de su intervención, en un acto en el que, además, han tomado la palabra tres mujeres referentes en distintos ámbitos.
Es el caso de Ana Megía-Macías, emprendedora castellano-manchega en el campo de la investigación y la innovación; Eva Lozano, jefa del Servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario de Toledo; y Cristina Landete, una joven sordociega de 15 años, que destaca por su trayectoria deportiva en el mundo de la equitación. De igual modo, otra mujer, la compositora e instrumentista Ana Alcaide, ha sido la encargada de aportar su tradicional y enraizada melodía a esta ceremonia institucional.