Juega como nunca y pierde como casi siempre

A perro flaco todo se le vuelven pulgas, es como se podría definir el encuentro que se pudo vivir entre talaveranos y quintanareños, ya que los unionistas realizaron una gran primera parte, pero se vinieron abajo en la segunda y finalmente cayeron derrotados.

Desde el pitido inicial, los de la Ciudad de la Cerámica fueron muy superiores a sus adversarios y disfrutaron en los primeros minutos treinta minutos de encuentro, de varias claras oportunidades en las botas de Rober y Borja Lafuerza, quienes las fueron desaprovechando, una a una, ante un gran Javi Martínez que detuvo todo lo que le llegó a su meta. Por el contrario el equipo dirigido por Tolo Ocaña, en la primera oportunidad de la que dispusieron, la mandaron al fondo de las mallas con un disparo cruzado de Bibi que significó el cero a uno con el que se llegó al descanso.

Tras el paso por vestuarios, el guió siguió siendo el mismo, pero con la excepción que los de Abraham Díaz marcaron en la primera que tuvieron, con un pase de Borja que finalizó Rober al fondo de las mallas poniendo las tablas en el marcador. Un tanto que dio alas a los azulones, quienes pusieron todo de su parte para ponerse por delante en el marcador. Gerar tuvo en sus botas en un mano a mano con el meta el dos a uno, pero en la siguiente jugada los conquenses con un centro medido de Bibi a la testa de Carlos para que pusiera el uno a dos en el luminoso.

Este tanto hizo mucho daño a los talaveranos, rompiendo además el encuentro. Los dos conjuntos estuvieron volvados al ataque dejando al descubierto sus defensas y permitiendo que los pocos espectadores presentes en el coliseo talaverano pudieran disfrutar de multitud de oportunidades. Hubo una gran diferencia en estos minutos, y fue que los unionistas no fueron capaces de anotar sus ocasiones, mientras que los visitantes tres minutos después del segundo anotaron la sentencia obra de Javi Bolo.

Ya en los minutos finales de la contienda, los cerámicos siguieron intentando meterse en el encuentro. Romi estuvo a punto de conseguirlo, pero de nuevo Javi Martínez se metió en el camino de los locales. Cholilla, a seis minutos para el final, y con la defensa azulona vendida, anotó el tanto de la sentencia que deja a los azulones en el farolillo rojo.