El cierre de 2021 se va acercando y este año ha estado marcado por muchos acontecimientos, algunos buenos y otros que no recordamos tan buenos. El principio de año le recordamos bañado de blanco en todo el país, aunque a Talavera no llegó, Filomena inundó carreteras y calles tanto de la provincia como de CLM. El Covid también recibió con nosotros el inicio del 2021, con restricciones, que poco a poco se fueron levantando para recibir la “nueva normalidad” gracias a la llegada de las vacunas y la máxima responsabilidad de la población, disfrutando de la apertura de nuevo de la hostelería, vuelta de la cultura, salir a la calle sin toque de queda ni mascarilla —aunque ésta última ha vuelto a finales de año—; un verano mucho más relajado pero unas navidades en las que la variante Ómicron ha hecho crecer de nuevo todos los casos con un repunte considerable de contagiados en todo el país. Pero no todo ha sido pandemia y vacunas este año, Talavera ha ido evolucionando a nivel tecnológico, recibiendo nuevas empresas. Además, la Ciudad de la Cerámica ha sido una ciudad olímpica con la participación de nuestros deportistas Sandra Sánchez, Paco Cubelos y Fernando Alarza en los JJOO Tokio 2021, poniendo a Talavera en el punto más alto con el oro de Sandra. La lucha contra la despoblación también ha sido muy importante este año, con la creación de una nueva ley impulsada por Castilla-La Mancha contra la España vaciada.
CLM aprueba su estrategia contra la despoblación, la primera de toda España
Leer más
A principios del 2021 el Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha aprobó el anteproyecto de ley contra la despoblación, una nueva norma pionera cuyo trámite arrancó en 2020 en el marco de un Pacto Regional.
Es la primera vez que se usan medidas fiscales para frenar la despoblación y la vigésimo primera ley en culminar positivamente su tramitación en la cámara. Cuenta con siete títulos y 75 artículos, en los cuales se garantiza el acceso a los servicios públicos y la igualdad de oportunidades para los habitantes del medio rural, y cuenta con más de 200 medidas a desarrollar en cuatro ámbitos.
Esta iniciativa viene dada ya que uno de los problemas estructurales que tiene Castilla-La Mancha es la despoblación en amplias zonas rurales, sin ser un problema aislado, sino afectando también a un gran número de territorios de España y Europa.
Casi antes del cierre de este año, CLM ha conseguido que el acuerdo del Consejo de Gobierno por el que se aprueba la Estrategia Regional frente a la Despoblación en la región entre en vigor.
A nivel autonómico, Castilla-La Mancha “ha sido pionera” a la hora de abordar el reto demográfico. Respecto a Europa, en este nuevo periodo 2021/2027 se enfocan también principalmente en la despoblación, incluyéndola como uno de sus 5 Objetivos Políticos para la Política de Cohesión el de “Una Europa más cercana a los ciudadanos”.
Un tema que también ha llegado a los medios de comunicación traspasando fronteras, como cuando la prensa de Dinamarca se interesó por la Ley de Medidas contra la Despoblación de la región recorriendo varios puntos de ésta. Compañías como Eurocaja Rural o Iberdrola también han estado este año muy pendientes de la importancia de este tema.
Esta ley aborda, entre otras, cuatro temas de vital importancia: educación, sanidad, servicios sociales y transporte.
Respecto a la educación pública: garantiza colegios donde al menos haya 4 niños, programas de Formación Profesional adaptado a la realidad de las comarcas y un contrato programa para financiar enseñanzas que son son obligatorias para jóvenes, evitando así que se abandonen los pueblos para buscar la educación que no se puede dar en estas zonas.
En el ámbito de la sanidad: incrementan los servicios de Atención Primaria gracias a la evolución de la tecnología, garantizando acceso al servicio de Urgencias en 30 minutos y facilitando el acceso a oficinas de Farmacia en estas zonas, implementando con los colegios profesionales.
Servicios sociales: se garantizará la teleasistencia avanzada para mayores de 70 años, asegurando a éstos el cuidado en sus domicilios. Cuando no puedan mantenerse en sus domicilios, se garantizan centros residenciales a 40 kilómetros dentro de la propia comarca, y además se incluye un programa de atención específico a personas con discapacidad que residan en zonas despobladas.
Por último, pero no por ello menos importante, el transporte: este servicio se llevará a demanda para conectar a las cabeceras de comarca con todas las localidades y mejorar la prestación de servicios esenciales.