La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha considerado que, si se llega a tomar la medida del toque de queda para contener la pandemia de coronavirus, "parecería razonable" que se adoptase a nivel nacional.
"No hay que descartar absolutamente nada", ha señalado Fernández a preguntas de los medios en rueda de prensa tras dar cuenta de los acuerdos del Consejo de Gobierno, donde ha admitido que el toque de queda "es muy llamativo" pero ha incidido en que "conviene tener las cosas claras a nivel nacional".
En este sentido, ha confiado en que en la reunión del Consejo Interterritorial de Sanidad de este jueves, a la que la Comunidad Autónoma acude "con todo el ánimo constructivo" --y que está previsto que aborde este tema--, "se produzca ese diálogo".
La portavoz regional ha comentado que Castilla-La Mancha, "siempre, desde que se inició la pandemia" ha mantenido "posiciones de máxima lealtad al Gobierno de España y al resto de comunidades autónomas porque no hay otra manera de afrontar las cosas".
De otro lado, preguntada por la posibilidad de reducir en la región en número de personas que se pueden reunir en el ámbito familiar, ha recordado que en Castilla-La Mancha se están adoptando medidas de nivel 1, 2 y 3 dependiendo de la situación epidemiológica, bien sea por municipios o por áreas sanitarias y aunque están dispuestos a tomar "medidas que sean solventes", hasta ahora se está demostrando que la región ha pasado "de estar por encima de la media nacional en el nivel de incidencia acumulada a estar por debajo".
"Nos alegramos de que las medidas estén conteniendo el virus pero necesitamos de la colaboración de absolutamente todo el mundo y no nos temblará la mano", como ha ocurrido cuando se ha decidido poner en marcha el confinamiento perimetral. "Creo que la mayoría de la gente nos comprende, más allá de que cuando nos toca nos puede doler o perjudicar".
Finalmente, ha admitido que "ningún gobernante, en ninguna parte del mundo, puede decir que tiene controlada la pandemia", aunque están "deseando poder llegar a ese día", y ha incidido en que en Castilla-La Mancha se ha controlado la incidencia acumulada "a pesar de que hay transmisión comunitaria". "Hemos ido reduciendo poco a poco las cifras de contagio, tomando medias contundentes y adecuadas a las circunstancias epidemiológicas", ha asumido.